Fue automático. Aterrizó Nuno, colocó las piezas y el Valencia jugó con coherencia. Sin ser algo vistosísimo, porque no lo pretendía, el 4-3-3 de Espirito Santo aseguraba la defensa ché y forzaba errores en su rival más cerca de su área que de la de Diego Alves, y así empezaba a dominar el juego. Varios de sus hombres, de hecho casi todos, llamaron la atención, si bien había dos que parecían tener un peso mayor tanto en el sistema como en la identidad, Daniel Parejo y Paco Alcácer. Es decir, el interior derecho y el delantero centro del equipo. Luego, con todo en marcha, el proyecto sumó dos recursos más de primer nivel, Enzo Pérez y Álvaro Negredo. O sea, otro interior derecho y otro delantero centro. Y está costando juntarlos.
Con dos 9s está atacando peorDe cara a compaginar a Negredo con Alcácer, Nuno ha probado dos remedios diferentes, y ambos han ido en perjuicio de la superioridad numérica en banda. El primero (3-5-2), que no se estrenó pero sí se hizo famoso contra el Madrid, se cimienta en una defensa de tres centrales y da cada banda a un solo hombre, el carrilero. El segundo (4-3-3), visto en Vigo, tira de la asimetría que popularizó Fabio Capello cuando coleccionaba títulos de Liga. De los tres atacantes, dos se quedan en el medio como delanteros centro y solo uno hace de extremo, dejando vacía la banda contraria. La plaza extra que Nuno necesita para poner dos arietes a la vez por ahora se está extrayendo de los costados, de uno o de ambos según la variante que se elija, y sobre el césped el efecto no parece positivo. El Valencia no amenaza por fuera como antes, no abre al rival y Parejo y Gomes gozan de menos espacios que en las primeras jornadas del curso. Así a Dani le cuesta más dirigir y André sufre más para batir líneas. Dicho de otro modo, el Valencia está atacando peor.
De la misma manera está sufriendo más contra los laterales ofensivos del oponente. Anoche en Copa el joven Duarte le creó más peligro de la cuenta, así como Marcelo en la visita del Real a Mestalla.
Enzo Pérez, Dani Parejo y André Gomes son interiores. Los tres.
Las novedades en el centro del campo están menos consolidadas y valorarlas se encuadra más dentro del análisis previo. El triángulo del éxito ché estuvo compuesto por un mediocentro de perfil defensivo, un interior derecho especializado en la salida desde atrás y la dirección del juego y un interior izquierdo muy ofensivo cuya principal tarea era agredir al adversario con sus virtuosas conducciones. Por su parte, Enzo Pérez viene a ser un box to box de carácter ultra físico que, si bien no carece de técnica, ni tiene talento como organizador ni magia para regatear por dentro. Entrase por quien entrara, el argentino iba a implicar sí o sí un cambio en el sistema, pues no se parece a ninguno de los que eran titulares. ¿O sí?
Aprovechando que Fuego causaba baja, sus primeras incursiones en el once inicial han sido como mediocentro. En dicha posición, virtudes como su llegada al área o su presión en campo rival quedan anuladas, ya que precisamente el pivote es quien debe fijar posición por delante de su defensa -por detrás de sus interiores-. Expuesta esta pega, que en absoluto es trivial, hay que añadir que condiciones para ser un buen mediocentro sí posee. No tiene ni experiencia en la posición ni base táctica para ésta a día de hoy, pero sus características físicas y técnicas se adaptan bastante bien. Es resistente, sabe usar su cuerpo, mete el pie con acierto y a la hora de pasar el balón está en la media de los equipos grandes. Si Nuno tuviera previsto darle cancha a Enzo en esta demarcación, la convivencia de los tres medios con más potencial del club sería viable. Si no, o se busca un nuevo sistema o habrá que quitar a Gomes y cambiar a Parejo de lado. En conclusión, las reformas serán obligatorias. La menos profunda, aunque a su vez de difícil ejecución, pasa por reformar al propio Pérez y convertirlo en lo que puede ser pero no es aún. Considerando que el Valencia es un proyecto nuevo cuya meta es ganar títulos, este pequeño freno en su ascensión valdrá la pena. La prioridad es aglutinar y compatibilizar la mayor cantidad de talento posible. Puede que para hoy (se busca la 4ª plaza) bastase con menos. Mañana en cambio, no sobrará ni una gota.
javimgol 14 enero, 2015
A mí lo de un centro del campo con 3 interiores y sin mediocentro…salvo casos excepcionales en que el interior más retrasado es un genio sin par, no lo suelo ver,
Francamente, y ahora es fácil decirlo, no entiendo mucho la planificación deportiva del Valencia. Como deja caer el artículo, si tus mejores hombres o al menos los más llamativos son dos interiores (Parejo y Gómes) y dos delanteros (Alcácer y Rodrigo), ¿para qué traes por 50 kilos a otro delantero y otro interior)? Solo falta que traigan otro lateral izquierdo para que le quite minutos a Gayá…