A falta de dos jornadas para que la fase de clasificación mundialista toque a su final, no hay mayor atractivo en el continente europeo que la lucha por desbancar a Inglaterra en el Grupo H. Los de Roy Hodgson están muy lejos

George Bernard Shaw, Nóbel de Literatura irlandés, escribió que la juventud era una enfermedad que se curaba con el tiempo. El señor Shaw pronunció eso porque no vio jugar ni componer música con la pelota a Michael Laudrup en 1984 y en 1992.

Que ganar es la mejor medicina contra cualquier mal no vamos a descubrirlo ahora. El triunfo legitima, te hace real, creíble. Te da forma. En España sabemos mucho de esto. La victoria en la última Eurocopa sirvió de sostén emocional a muchos

KONOPLYANKA (Ucrania)

Yevhen Olehóvich Konoplianka (29 de septiembre 1989, Kirovohrad). Extremo del FC Dnipro y la Selección Ucraniana.

Muhammad Ali, que fue tan grande fuera como dentro del ring, aguardaba una brillante capacidad de reflexión y lucidez para con el deporte, entendido como elemento vital de una sociedad. Nadie escapó a su magnetismo

La noche caía oscura sobre la capital de Ucrania y los focos se mostraban reticentes a iluminar las estrellas que lo albergaban. Ya desde antes del comienzo la ausencia de Rakitsky supuso un duro golpe a la calidad individual

En principio, por falta de experiencia y un nivel medio en la línea de cuatro un tanto irregular, Ucrania se postula como uno de los candidatos a equipo más débil del torneo; sin embargo, su localía y su descarada apuesta por la siempre imprevisible juventud