La salida de Cristiano Ronaldo del Real Madrid dejaba un vacío goleador que obviamente resultaba el principal problema que debía de resolver Julen Lopetegui. Sin un relevo concreto proveniente del mercado de fichajes, la pizarra tenía que solucionar en muy poco tiempo un marrón importante; un muro difícil de trepar que acabó provocando un tremendo agujero de confianza en el seno de la plantilla que acabó comiéndose el proyecto del vasco.
Sin embargo, la marcha del luso derivaba en un problema más profundo, relacionado con la memoria táctica que el Real Madrid había adquirido teniéndole a él como indiscutible estrella. Porque Cristiano Ronaldo, a pesar de haber edificado uno de los grandes pilares de su prestigio gracias a ser uno de los mejores rematadores de la historia, ha sido clave en el esqueleto táctico de un proyecto que ha ganado cuatro Ligas de Campeones en cinco años.
El Real Madrid no sólo perdió una cantidad ingente de goles tras la salida de Cristiano Ronaldo
La hiperactividad de Cristiano Ronaldo para influir en los tres carriles y su capacidad técnica para tejer asociaciones con cualquiera que pasase cerca ha activado durante muchos años a sus compañeros de equipo. Un apoyo para el juego de Marcelo en campo rival, una línea de pase para Toni Kroos, un arrastre para una conducción de Modric o un sinfín de jugadas que ejecutar junto a Karim Benzema. El hoy jugador de la Juventus, además de goles, dejaba un rastro sobre el césped que allanaba el camino para los demás.
El aterrizaje de Vinícius Junior en el primer equipo del Real Madrid explica un porqué que era complicado de vislumbrar en un primer momento. A tenor de lo que el joven brasileño está mostrando, el club buscaba un relevo a largo plazo para el portugués basado un tipo de movilidad muy concreto, y buscando una prestación similar en términos de energía a la hora de sentir el fútbol. Era obviamente imposible reemplazar esas cifras goleadoras, y el conjunto blanco ha buscado tejer un puente hacia el futuro con un futbolista que pudiera reproducir movimientos similares a los que ofrecía su gran estrella.
Vinícius Junior es un jugador aún por hacer: su técnica para marcar diferencias en la élite aún debe limar un buen número de asperezas, pero sus movimientos son ya de jugador maduro
Es imposible valorar a estas alturas cuánto limará Vinícius Junior su aún irregular técnica y por tanto sería jugar a ser adivino intentar considerar si acabará asentándose como una superestrella en el Real Madrid. Aún está lejos de ejecutar jugadas relacionándose con los demás con continuidad al ritmo que le piden cracks como Benzema o Marcelo –distinto es cuando se olvida del entorno y arranca, donde sí está siendo capaz de generar desequilibrio-, y por supuesto aún queda parece lejos en el horizonte, viendo sus impactos con el balón a la hora de finalizar jugadas, que tenga cifras cercanas a los 30 goles. Yendo esto por delante, está siendo capaz de algo muy difícil de ver con 18 años y en la exigencia que supone jugar en el Madrid.
Vinícius siente el colectivo de una forma muy natural, y lo hace con un paralelismo sorprendente con la figura de Cristiano Ronaldo. Por el momento sólo es capaz de hacerlo en los instantes previos a contactar con la pelota –lo que explica que de momento su relación con Marcelo transmita por el momento ser de poca calidad-, así que no hace falta explicar todo el camino que le queda por recorrer, pero eso ya ha supuesto una energía en el plan de juego blanco absolutamente imprescindible, más viendo los problemas de la primera mitad de curso: tanto para generar ventajas en el dinámico plan de Lopetegui, como para activar el ritmo en la rígida propuesta inicial de Solari.
El extremo brasileño domina tanto el movimiento horizontal como el vertical cuando un compañero tiene la pelota, lo que explica que el sector izquierdo del ataque blanco esté siendo en este momento un torrente de producción de ocasiones. Karim Benzema, que además disfruta cayendo sobre ese perfil, encaja perfectamente con ese tipo de movilidad tan enérgica del brasileño, que le abre espacios tanto si el francés busca recibir al pie como si pretende terminar en el corazón del área –un movimiento que estamos viendo repetirse mucho en los últimos partidos-, por lo que no sorprende que entre ambos esté apareciendo una sinergia especial.
Benzema ha conectado de manera especial con Vinícius Junior
Desde el punto de vista táctico, hay que sumar que Vinícius está aportando un juego interior que en el arranque de la era Solari no existía, ya que en el comienzo sus extremos siempre actuaban a pie natural, por lo que la amenaza para el defensor en este momento se multiplica, al tener que estar pendiente de una posible ruptura interior del propio brasileño, o de un movimiento vertical del lateral, que Sergio Reguilón está interpretando con bastante acierto. A todo ello hay que añadir que a nivel psicológico, Vincíus está enseñando una entereza impropia para un jugador de su edad que aterriza en el primer equipo del Real Madrid, un detalle que no hay que pasar por alto para explicar por qué está pudiendo pesar en el difícil presente del equipo blanco.
Puesto el tren en los raíles, donde hay que darle el mérito que se merece la aparición de Vinícius Junior y la apuesta continuada de Solari en su figura, al Real Madrid le queda completar el plan con una serie de acciones que el brasileño no parece capaz de ejecutar a día de hoy. Si de verdad Vincícius se asienta en esa posición de extremo izquierdo –que el argentino parece tener reservada para Gareth Bale, pero que tras la mejoría blanca en las últimas semanas puede abrir el debate-, el Real Madrid necesita un plus de determinación en la pelea por los títulos.
Activar a Gareth Bale resultará fundamental para que el Real Madrid tenga la determinación suficiente en los últimos metros en el tramo decisivo de la temporada
Si Solari mantiene a Vinícius en izquierda en el 4-3-3, la banda derecha parece reservada para un Gareth Bale que no ha terminado de entrar en la ecuación, si bien es cierto que su falta de continuidad por problemas físicos no nos han dejado ver con frecuencia si su abanico de movimientos puede adaptarse a las circunstancias. Hay que decir que el galés es un jugador cuyos mejores momentos a nivel de jerarquía –lo que a priori quedaba reservado para él en el Real Madrid tras la salida de Cristiano Ronaldo- han llegado acercándose más al balón: Tottenham 2012/2013 y Gales en el último lustro. Sin embargo, es un paso que en Chamartín no ha sido capaz de dar.
Esto abre un inevitable debate sobre el galés, pero a nivel práctico y analizando el contexto actual del Real Madrid, le reserva un espacio si acaba compartiendo delantera con Benzema y Vinícius. El galés, en el Real Madrid, ha demostrado determinación y gol, y que el equipo incline las jugadas sobre el perfil opuesto le puede limpiar las llegadas a portería rival, habiendo una gran diferencia a cuando el triángulo Kroos – Ramos – Marcelo lo hacían en el pasado: ahora al equipo le interesa que los disparos los ejecute él, dada la enorme diferencia de finalización entre Vinícius Junior y Cristiano Ronaldo. Está por ver qué estatus mantendrá el brasileño, qué pretende Solari con Gareth Bale y qué espacio tienen otros nombres fundamentales en el proceso como Lucas Vázquez o Marco Asensio, pero más allá de eso, el Real Madrid nos está enseñando que tiene un plan muy meditado con Vinícius.
Fernandojb 6 febrero, 2019
Muy interesantes los dos artículos, escribo en el madrid por motivos un poco obvios, jaja.
A mi lo primero venimos de un barca – madrid que fue un esperpento del madrid, no fue competitivo, se supone que ahora esta a mayor nivel, pero eso hay que acreditarlo, y en el nou camp, no es facil y este madrid ha demostrado mas fuerza en casa, fuera esta mas flojo.
para mi la clave es si el madrid puede jugar por las bandas laterales, incluso salida, y es capaz de dar ritmo, si se juega por la zona central, el barca tiene mucho ganado.
bajo ese prisma, el madrid tiene a bale, lucas, vinicius ( que es la novedad y como se dice arranca desde atras , es rapido ) y no olvidemos a a asensio , un jugador, que hace mucho daño si esta entonado.
el barca intentara, atraer por dentro, a los medios, para romper y que se juegue por esa zona.
tampòco creo que sea esencial ( yo no le sacaria en el nou camp al principio viniicius ) el tema vinicius de principio, mas bien me parece que el y asensio pueden tener un rol importante dentro de un partido , que el madrid lo tiene que hacer agonistico, pero claro hay liga, champion, etc, parece dificil que se juegue a tanto ritmo.
a mi me parece que hay que sacar conclusiones , mas en global, con vinicius, no tanto un partido, y ademas el barca visita san mames, que es un campo que te exige fisicamente.
tambien Solari es argentino y supongo que sera un poco mas especulativo que Zidane y el barca se supone que sacara 4 medios, no creo que plantee un partido de tu a tu.