En España son dos las magnitudes objetivas que determinan el resultado de un partido. La primera es el número de goles, por supuesto. Decide el reparto de puntos. Y luego, si la diferencia anotadora no fue un dislate, entra en juego la variable «posesión», que suele venir a definir quién desarrolló mejor fútbol. Más allá del forzado debate generado, origen de dos posturas contrapuestas muy extrañas, el hecho es que esto ha confundido a algunos equipos. De verdad hay colectivos que hacen de tener el balón su pretensión base, acumulan posesión sin obtener ventajas y terminan sufriendo lo insostenible en transición defensiva. Juan Ignacio Martínez lo leyó, se inventó el Levante 2011/12 e hizo historia. Fue el equipo-posición, el bloque paciente. El 6º clasificado del campeonato. El Castillo de Arouna Koné.
El ya futbolista del Wigan Athletic es un talento. Un delantero superior que tendría que estar jugando la UEFA Champions League año tras año. Lo que hizo al lado de Ballesteros, Barkero e Iborra fue arte. Era el movimiento distinto y la decisión diferente en un sistema marcado por la monotonía, que tenía por principal virtud no aburrirse nunca de ésta. O sea, era la individualidad que equilibraba y completaba por sí misma a diez compañeros que siempre hacían la misma cosa. Koné fue aéreo y terrestre, veloz y pausado, asociativo y autónomo, asistente y goleador. Así rindió contra todos, incluyendo su duelo ante los, para muchos, dos mejores centrales del mundo. Aquel día resultó ganador parcial, como siempre; aunque su Levante perdiese, como no tantas veces ocurriera.
Gekas será su sucesor. Un delantero más que correcto y un muy buen movimiento de mercado. Además es coherente y continuista, pues bajo su apariencia de pensar poco es capaz de mezclar el apoyo con la ruptura de forma eficiente. Hace dos meses superó cada intento de anticipación de Mats Hummels en el envite de Cuartos de Final, sin ir más lejos. Lo que ocurre es que el griego, ídolo de nuestro singular compañero Marc Roca (ojo a «38 Ecos»…), no tiene nada de genial. No implica ninguna diferencia. Es un soldado más dentro del esquema, un semejante al resto de piezas del puzzle de Juan Ignacio Martínez, ya un año más viejo que hace cuatro estaciones. Pese al nivel de Theofanis y lo bien que le queda el típico sombrero navideño, al Levante no ha venido a verle Papá Noel con este cambio de cromos.
@migquintana 15 agosto, 2012
El Levante viene de Caicedo y de Koné, son buenos presagios para Gekas. No creo que se revalorice como ellos, es imposible, pero si el carácter de Ballesteros, Del Horno o Barkero le hacen imaginar que eso no es Valencia sino Grecia, será un fichaje acertadísimo. Sobre el papel ya lo es, vaya.
@Some
Yo entiendo lo de ''continuismo'' sobre todo en base al colectivo, más que por lo que fue Koné. Es imposible que tu amigo otorgue tantos metros como hacía él, que sea capaz de dormir el partido como tú comentas. Es que, joder, como refleja Abel en el texto, Koné fue capaz de derrotar a Pepe+Ramos. Una barbaridad. Se van a perder metros, muchos. Se dejarán de ganar segundos, con lo que el resto de guerreros tendrá menos oxígeno. Y, claro, se perderán puntos sin sus goles. La ecuación no es buena, pero eso no quita para que el fichaje de Gekas sí lo sea.