Ceballos en el Emirates

Dani Ceballos es mucho más de lo que el Arsenal se hubiese podido llegar a imaginar tras la marcha de Aaron Ramsey a la Juventus. El futbolista utrerano aterriza en Londres tras un Europeo sub-21 inmaculado a nivel particular, con el objetivo de seguir creciendo en un club y en una liga que reúnen muchos de los requisitos que ostenta su fútbol. Si todo sigue el guion previsto, Ceballos, con Unai Emery en el banquillo del Emirates, podrá volver a sentirse realmente importante. Y la Premier, con su ritmo y sus transiciones, puede ser un muy buen escenario para un futbolista que bajo el capó ha demostrado ir bastante bien servido. Ceballos necesita tener minutos. Y el Arsenal, directamente, necesita tener a Ceballos.

A expensas de un dibujo que seguramente no será el único en la temporada del Arsenal, Ceballos recala en una plantilla que, más allá de sus dos puntas y de la más que conocida intermitencia de Mesut Özil, no va especialmente holgada de talento. Xhaka, Guendouzi, Torreira o Willock, que a priori serán quienes acompañen a Ceballos en el medio campo, son cuatro futbolistas que, cada uno con sus más y sus menos, no entienden la posición desde el recorrido, la jerarquía y la autonomía con la que lo hace Ceballos. Es por ello, siguiendo la línea de este mismo prisma, que su llegada puede entenderse como una gran oportunidad -de la que derivan distintas opciones- para el particular método de Unai Emery.

Emery podrá juntar a Ceballos, Torreira y Xhaka en medio campo

Independientemente del plan, más reactivo (espacio) o proactivo (posesión), Ceballos dotará al Arsenal de dinamismo, creatividad y una pizca bien colmada de superioridad a partir de sus intervenciones con la pelota. Porque Ceballos, el proyecto de jugador joven más ambicioso que maneja en estos momentos el fútbol español, es una pieza diseñada para que sus equipos sean dominantes a través del esférico, sin por ello renunciar a una movilidad vertical que, más desde el desplazamiento que el pase, le convierten a su vez en un recurso realmente útil para atacar en contextos mucho más divididos, como se le presuponen a este Arsenal. Porque en el punto de equilibrio entre las conducciones de Ceballos hacia la frontal del área rival, como ha dejado patentes en la España de Luis de la Fuente, y la verticalidad de Nicolas Pépé, que en principio compartirá perfil (derecho) con él, y que funciona mejor con espacios que con la pelota ‘al pie’, está la clave del éxito.

Lo normal será que Pépé comparta perfil (derecho) con Ceballos

El depósito de Ceballos es lo suficientemente generoso como para creer que, si Emery decide competir desde el repliegue y no tanto el esférico para que sus tres atacantes gocen del suficiente abanico espacio-temporal para amenazar en carrera, el sevillano no tendría demasiados problemas para funcionar en diferentes posiciones y distintos roles. Yendo a la presión, si es que, por el motivo que sea, juega en un sistema con uno o como mucho dos de los tres puntas -Aubameyang, Lacazette y Pépé-, y sirviendo de lanzadera, a modo de cremallera, entre el centro del campo y la delantera, en un rol que el Arsenal había perdido tras la salida de Ramsey. Sea como fuere, y a la espera de ver cómo se van desarrollando las cosas en el Emirates Stadium, lo cierto es que la incorporación del Arsenal FC es una oportunidad espléndida para todas las partes. Unai inclusive.