Al Arsenal se le tilda de irregular cuando quizá no lo sea tanto. Quizá sea más preciso acusarlo de incompleto. Las bajadas o subidas de su rendimiento no dependen de con qué pie se levante su plantilla de la cama cada día de partido, sino del tipo de desafío que toque cada vez.
El problema es el de siempreEl principal problema del Arsenal sigue residiendo en que le cuelan transiciones con demasiada facilidad. Wenger siempre ha sido más hábil atacando con velocidad que a bajo ritmo, y siendo sus dos cracks, Özil y Alexis, dos especialistas del contragolpe, se ha sacudido esa cadencia cansina que tanto daño le causó en el pasado reciente. La traba radica en que, si la jugada no sale limpia desde el origen, el equipo busca soluciones inmediatas, lo que lleva a los miembros de su doble pivote a abrirse o descolgarse, debilitando así la transición defensiva del colectivo, que queda a expensas de que Koscielny se imponga sin fallo al delantero rival en sus constantes intentos de anticipación. Él gana a la mayoría, pero ante los mejores es imposible no fallar, y ayer mismo, el Kun dejó a De Bruyne y Silva en un dos contra uno tras una de estas acciones.
Pero el nivel del repliegue del Arsenal es más que aceptable.
Lo que no se le termina de dar mal al Arsenal es encerrarse. Primero, porque Özil es uno de los mejores y más decisivos exponentes del mundo al contraataque y porque Alexis, Walcott, Campbell o Ramsey saben cómo secundarlo. Después, por una de las reglas más sencillas del fútbol: cuanto menos espacio se defiende, mejor se suele hacer. Si Koscielny tiene que correr cinco metros en vez de 15, si el delantero tiene medio metro para controlar en vez de dos, y si Monreal y Mertesacker están a cuatro zancadas de la ayuda en vez de a ocho, por pura matemática, la eficacia se fomenta. Y da hasta para resistir frente al dotadísimo Manchester City sin pasar por demasiado apuro.
La gran pega se localiza en la rara falta de potencial defensivo contra centros laterales. Se trata de uno de los pocos -si es que existe alguno más- equipos de Europa que se sienten más cómodos cortando pases interiores que despejando envíos venidos desde la banda. Gunners…
@RdGarca 22 diciembre, 2015
En los últimos años han sido el colmo de la regularidad: contra equipos de igual o más calidad, concentración a tope y partidazos (Bayern, City, United, aquel grupo de la muerte), y contra equipos "menores", se despistan y ocurren cosas muy extrañas (Monaco, Olympiacos). De todas formas, son ahora mismo el mejor equipo (a la espera del bajón del Leicester) de la Premier.
Las áreas a mejorar son el mediocampo, en donde falta por lo menos un pasador solvente, y en lo de los centros laterales, que no deja de ser extraño considerando que en la portería tienen a una de las referencias en centros laterales de la década. Afortunadamente, no es algo que aproveche mucho el Barca…