Dusan Tadic llegó al Ajax como flamante fichaje de un proyecto que quería añadir a sus jóvenes valores futbolistas con más experiencia internacional, y su estilo además encajaba de maravilla con lo demandado al menos a uno de los extremos del plan de Erik Ten Hag, y por supuesto, ha hacer la mediapunta del sistema. Sin embargo, el futbolista serbio ha sido empleado de forma puntual como falso nueve en el 4-2-3-1 del Ajax, y salvo sorpresa será la fórmula que veamos en el Santiago Bernabéu frente al Real Madrid.
Tadic es una variante menos ‘agresiva’ que Dolberg o Huntelaar, pero le da a su equipo más orden cuando ataca
La aportación del serbio desde ese rol representa un problema añadido para la maltrecha estructura blanca. Si el Ajax, como se presupone, ejecuta con tanto acierto la presión en campo rival como hizo en el encuentro de ida, podrá juntar piezas cerca de la meta defendida por Courtois, donde la capacidad del serbio para tirar movimientos de apoyo y ayudar a que los centrocampistas y los extremos se acerquen al unísono puede suponer un problema añadido para el equipo blanco.
El serbio es un apoyo extra en las construcciones ofensivas del Ajax
Compensa además realmente bien el Ajax el hecho de que su delantero centro abandone la zona de nueve y se mueva hacia ambos perfiles o incluso a medio campo, gracias a la presencia de un Donny van de Beek que interpreta de maravilla la movilidad sin balón para cargar el área, por lo que la falta de un ariete al uso que busque zona de finalización es un problema menor. Por supuesto, la alternativa de Dolberg o Huntelaar añadiría presencia en el área de forma más constante, pero el equipo ajacied cuenta con un centrocampista que permite que el Tadic nueve no deje sin colmillo al sistema.
Su capacidad para orientar los ataques es oro en un equipo que juega a altísimas revoluciones
En cualquier caso, la clave para entender la funcionalidad de Tadic como nueve está en el ritmo: el Ajax juega a altísimas revoluciones, busca robos muy altos y es muy agresivo después de recuperar la pelota, de modo que tener un jugador que pause esos ataques actuando en la última línea hacen los ataques aún más complicados para sus rivales, más si, como es el caso de este Real Madrid, la gestión del balón no tiene a sus piezas bien ordenadas tras perderlo.
David de la Peña 5 marzo, 2019
Obviamente, partido delicado para el Real Madrid, que tiene en el resultado de la ida un argumento para serenarse, cuestión que en este momento es lo que más dudas transmite en el juego de los de Solari.
Con un Ajax activo en la presión y sin Sergio Ramos, el Real Madrid puede tener muchísimos apuros, y esa versión Tadic de nueve para darle dirección a los ataques es una pieza de bastante valor para el Ajax. A ver qué versión vemos del Madrid, pero un hipotético 0-1 tensaría bastante el ambiente.