La fulgurante aparición de Vinícius Junior significó una actualización del ataque del Real Madrid que demostró que el sistema que estaba preparando Solari necesitaba dos cosas; una de ellas la traía el jugador brasileño de serie, ya que su explosividad, verticalidad, y tremenda velocidad para moverse a espaldas de la línea defensiva rival ofreció una profundidad que agitaba un ataque corto de mecanismos colectivos. La segunda la provocó el hecho de que uno de los dos extremos jugase a pie cambiado, ya que el juego interior en los últimos treinta metros se quedaba corto con la propuesta inicial, donde Lucas Vázquez y Gareth Bale acababan casi todas las jugadas saliendo hacia fuera.
De ahí que diera la sensación de que la evolución natural del plan acabase con el galés en el perfil derecho. Gareth Bale iba a rellenar los pasillos interiores arrancando desde la otra banda, y sobre todo y lo más importante, debía de darle al equipo un plus en la finalización que necesitaba imperiosamente teniendo en cuenta que el jugador brasileño aún debe limar sus últimos toques.
La configuración del ataque tenía un espacio reservado para Gareth Bale que el galés no está terminando de rellenar con rotundidad
Sin embargo, la aportación de Bale para el tramo decisivo del curso es una incógnita, puesto que a nivel de jerarquía no ha dado el paso adelante que se presuponía tras la salida de Cristiano Ronaldo, y entre su indeterminación a nivel de activación, lo plano que puede quedarse a la hora de construir una acción ofensiva el concurso de Lucas Vázquez, y el ostracismo de Isco Alarcón, aparece el nombre de Marco Asensio.
Partiendo de la base de que el mallorquín, a pesar de su tremenda zurda para golpear de media distancia, no ha demostrado serenidad de primer nivel para finalizar acciones tras recibir un balón al espacio o capacidad de remate para atacar centros laterales –y es por esto que el nombre de Bale se antoja imprescindible en el tramo final de temporada blanco-, no cabe duda de que a nivel de sistema su presencia en el extremo derecho eleva el potencial del plan de juego.
Las características de Marco Asensio encajan perfectamente con la necesidad que tiene el Real Madrid de mejorar la calidad de su posesión
A la aportación interior que supone que ambos extremos jueguen a pie cambiado hay que sumar la diferencia de ejecución entre uno y otro futbolista: Vinícius hace explotar la jugada y por eso sus movimientos son siempre más profundos, mientras que Asensio ayuda a crearla y por tanto puede ser un punto de apoyo en todo el carril central, que permite crear cadenas entre Benzema, Modric y Kroos. Ese rasgo de su juego es oro para el rígido sistema de Santi Solari.
Involucrando ese gesto en el todo, el Real Madrid necesita imperiosamente ganar altura de forma conjunta; poder intentar el robo con el equipo junto después de haber perdido la pelota puede limitar los largos esfuerzos que están haciendo sus futbolistas para recuperar el cuero, y la figura de un extremo derecho que se acerque al carril central para asociarse es un recurso de oro para ganar estabilidad. Que salga a cuenta dependerá de que además pueda hacer gol de diferentes formas, y aquí la sombra de Bale sigue siendo demasiado alargada. No obstante, a la espera del galés, Asensio tiene mucho que decir.
AArroyer 27 febrero, 2019
Es un debate que se lleva teniendo desde que Solari se hizo cargo del equipo. Y pasa el tiempo y no hay evolución ni miras más altas en la banda derecha, pero la verdad es que sabiendo que Vinícius por el momento no muestra mucho gol y que Benzema siempre está pendiente de coser al equipo y salir del área, la determinación de Asensio desde la derecha sigue siendo una oportunidad.
Nos comentaban en Youtube que Marco sigue teniendo un deficit a la hora de romper al área y ser agresivo, y ahí está su talón de aquiles, pero desde luego se entiende menos que Solari no lo active aunque sea desde el banquillo, con más continuidad. Ante el Ajax salió muy punzante y buscando disparo constantemente, le vi bien, y no se puede obviar que tiene gol y puntualidad en eliminatorias. Por contexto y posición parece el momento de ganar a Asensio como activo importante en el futuro.