Hipérbole e hipérbaton | Ecos del Balón

Hipérbole e hipérbaton

Como si se tratara de una genial hipérbole de Gabriel García Márquez, el Celta sólo pudo retomar el camino de la victoria a través del gol perfecto. El destino, llamado Juan Carlos en esta ocasión, apellidado Hemed o Iruretagoyena en otras, no les estaba dejando otra opción. Ya pasaban tres meses de su último triunfo, curiosamente tras una exhibición de juego, acierto y fortuna en todo un Camp Nou. En este tiempo los de Eduardo Berizzo las habían tenido de todas las formas y fondos. Como anoche. Pero eran jugadas insuficientes. Imperfectas. Esa internada de Santi Mina por derecha o el testarazo de Joaquín Larrivey hubieran sido goles bonitos, pero no bellos. Ni excelentes. Ni soberbios. Ni inapelables. Todo lo que sí fue el de Nolito, que colocó en el ángulo una asistencia sin tocar el balón de Fabián Orellana para delirio de Balaídos.

Ese balón, más que un gol fue una bombona de oxígeno para su entrenador. Los vigueses jugaban, disponían y llegaban, pero no marcaban y no ganaban. La ecuación era tan compleja que el propio Berizzo llegó a admitir que su «destitución sería entendible». Pero en sus palabras no se escondía su rendición. Y, para darle la vuelta, se sirvió de un novedoso hipérbaton: 4-2-3-1 con Fabián de «10». El chileno desbordó por dentro, generó superioridades por fuera y embotelló, con Augusto como Kevin Costner, a un Córdoba que nunca pudo correr. Pero, sobre todo, fue un movimiento ganador porque así logró que Orellana & Nolito se volvieran a juntar. Como en otoño, cuando, pese a la distancia, por desborde y ritmo siempre terminaban encontrándose. Como ayer, como en el gol, cuando ambos acabaron con la dinámica más complicada de explicar de la Liga.

7 comentarios

  • vi23 1 febrero, 2015

    Y qué me dices de la primera parte de Krohn-Deli. Batiendo líneas, recuperando… Casi me atrevería a decir que LE lo quiere para su Barcelona

    Lo del Celta es muy, muy curioso. En toda esta racha fue mejor que su rival es más de la mitad de los partidos

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  • elcuatttro 1 febrero, 2015

    Qué bonito hubiera sido ver a Iago Aspas en este Celta…

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  • @migquintana 1 febrero, 2015

    @Some

    Es que está lejos de la versión otoñal de Nolito. Muy, muy lejos. Le cuesta desbordar, le cuesta perfilarse y, a partir de ahí, el ataque del Celta pierde un poco de sentido. Sobre todo porque, en realidad, es el jugador con más gol -y por mucho- de la plantilla. No es lo mismo que se la juegue él o Krohn Dehli.

    @vi23

    El Krohn Dehli – Augusto Fernández fue una verdadera pasada.

    @elcuattro

    Qué bonito sería ver otra vez a Iago Aspas, fuera donde fuera. De hecho, el otro día en el Pizjuán le eché en falta junto a Bacca. Él es un jugador que podría mezclar mejor con el colombiano de lo que lo hace Kevin Gameiro, pero supongo que Unai Emery no le ve al nivel necesario para ello…

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  • Jose Luis 1 febrero, 2015

    No pude ver este partido. Esperaba la confirmación del Córdoba tras dos partidazos. Y esperaba una nueva exhibición de Bebé, Ghilas o Florin. ¿No hicieron buen partido? ¿O es que el Celta hizo uno de esos partidos a los que nos acostumbró en el primer tercio de la temporada? Es raro -cuanto menos- este Celta.

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  • @migquintana 1 febrero, 2015

    @Jose Luis

    No pudo salir, como te cuenta Marc. Normalmente el primer pase se daba por dentro, pero ahí Augusto Fernández ejerció de Javier Mascherano taponando cada salida del rival. Además, como los laterales celestes no se desplegaban, ya que eran de un perfil más defensivo (Sergi Gómez y Planas), el Celta siempre cerraba con al menos tres futbolistas. No fue la transición defensiva más ortodoxa de la historia, desde luego, pero le funcionó muy bien el plan a Eduardo Berizzo. El Celta fue muy superior a los de Djukic.

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  • Abel Rojas 1 febrero, 2015

    @ vi23

    De hecho para mí el Celta solo ha sido superado por "iguales" la semana pasada y la anterior.

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  • Ismael 1 febrero, 2015

    Si es que este Celta me recordaba al Betis de hace tres años que estuvo 11 jornadas sin ganar (10 perdidas y 1 empatada). Jugaba mejor que el rival, dándole baños tanto de juego como de ocasiones (partido ante Osasuna que termino perdiendo con gol de Nekouman en el descuento; no se creían las ocasiones que desperdiciaron) a veces… Al final terminó ganando y de que manera, remontando en el descuento un 0-1 ante el Valencia. Ese equipo casi termina en UEFA esa temporada y, a la siguiente, lo consiguió.

    La conclusión que yo saco es que en unas circunstancias como la de aquel Betis o la de este Celta no se puede echar al entrenador.

    A ver como termina el Celta a final de liga…

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