El Granada CF de Diego Martínez el protagonista de una de las mejores historias de la temporada. El regreso del conjunto nazarí a la máxima categoría del fútbol español está siendo sobresaliente. Y su victoria ayer ante el Valencia en el Nuevo Los Cármenes para clasificarse a las semifinales de la Copa del Rey no es más que la confirmación de lo bien trabajado que está este equipo física, táctica, técnica y psicológicamente. Porque el Granada es eso más allá de cualquier otra cosa, un equipo. O, mejor dicho, un equipazo.
Roberto Soldado está dándole mucha continuidad a este Granada
El Granada CF 2019/20 es capaz de dominar diferentes escenarios a través de la presión. Eligiendo bien las zonas de robo, acumulando muchas piezas en ellas, siendo agresivos a la hora de encimar la recepción y meter la pierna -sobre todo si el rival está girado- y transitando a través de los tres carriles, con una ocupación del espacio coherente pero sobre todo eficaz y eficiente, el cuadro granadino es un equipo reactivo desde un plan que en el fondo le permite ser proactivo. Robando y corriendo, con más o menos metros por delante, la intención de este Granada es defender siempre hacia delante. Pues es ahí -apretando desde los puntas y acompañando con los centrales- cómo y sobre todo dónde más cómodo se encuentra el Granada CF de Diego Martínez.
Roberto Soldado es y será para siempre patrimonio del fútbol español. El ‘9’ valenciano siempre ha sido una mezcla de talento y corazón, y ahora, en este equipo, se encuentra todavía más respaldado para seguir siendo el mismo que ha sido siempre. Jugando solo en ocasiones, algunas puntuales, como la segunda parte de anoche ante el Valencia CF, otras circunstanciales, como cuando ha sido acompañado de un tercer centrocampista, aunque por norma general ha compartido ataque con Carlos Fernández, Soldado es un delantero que domina bien el desmarque de apoyo y la devolución lejos del área, con lo que le permite al Granada atacar desde posiciones alejadas a la portería contraria, y dentro de la misma, ya sea a través de un centro lateral o mediante su propia iniciativa, siempre ha sido un ‘9’ con determinación. Y con ‘clutch’, como ayer volvió a quedar comprobado, en momentos importantes.
A pesar de la irregularidad de Montoro -a causa de las lesiones- este curso, el Granada ha encontrado en Gonalons y Yangel Herrera, juntos o por separado, dos futbolistas que le están permitiendo al equipo seguir siendo reconocible a través de su propuesta. Con ellos por delante, en el doble pivote, y Domingos Duarte y Germán Sánchez por detrás, saltando, metiendo la pierna y corrigiendo en las dos direcciones, hacia delante pero también atrás, el cuadro de Diego Martínez funciona como un acordeón. Y prueba de ello es que, sea Vadillo o Machís el que ocupe el perfil opuesto al de Puertas, Víctor Díaz o Foulquier quien recorra la banda o Montoro o Gonalons quien dé el primer pase tras la recuperación, la idea y la mentalidad, como equip(az)o, es la misma.
AdrianBlanco_ 5 febrero, 2020
Hay delanteros de pura raza y luego está Roberto Soldado. Qué partido hace ayer, por favor. 😀