Marcus Rashford demostró ayer ante el Tottenham de José Mourinho por qué, sin Pogba sobre el césped, es el único futbolista de campo con plenas facultades para llevar al Manchester United a otro nivel. En constante movimiento desde el sector izquierdo, con y sin balón, recibiendo al pie y corriendo al espacio, martilleando a Aurier en su uno para uno en el costado y agujereando al Tottenham en su zona más endeble del sistema, el futbolista inglés se lució en una de los noches más trascendentales para el United de Solskjaer.
McTominay bordó su partido desde el doble pivote (con Fred)
El técnico noruego supo desde un primer momento dónde no podía permitir bajo ningún concepto que su rival alimentase a Dele Alli. Y salvo la acción del empate, en la que el inglés se inventa de la nada un ‘recursazo’ técnico, lo cierto es que el Manchester United consiguió anular completamente a una de las principales bazas ofensivas de este nuevo Tottenham. Con una presión más adelantada en el arranque, como consecuencia de un plan más propositivo con el esférico, mediante el cual el United llegó a superar el 70% de posesión, y un repliegue más comedido tras el uno a cero, situando el bloque a baja altura (4-4-1-1), el plan de Ole Gunnar Solskjaer cumplió con su primer ‘gran objetivo’ de la noche.
Y en estas, es de obligado cumplimiento poner el nombre de McTominay sobre la mesa. El futbolista escocés se pasó todo el encuentro muy pendiente de la recepción de Dele Alli entre líneas. Saliendo fuera de zona para encimar y meter la pierna, yendo al choque, bloqueando las transiciones ofensivas de su oponente e impidiendo, en definitiva, que el cuadro de José Mourinho se hiciese fuerte dentro del carril central, el centrocampista del Manchester United fue, además de Rashford, la otra gran individualidad anoche.
Rashford fue una tortura para el sector derecho del Tottenham
Es evidente que el Tottenham de Mourinho se encuentra en una fase muy incipiente del proceso. Y esto fue lo que aprovechó el Manchester United para recuperar sensaciones. Inutilizando los dos principales recursos de su rival, la aparición de Dele Alli por dentro -como ya hemos detallado más arriba- y el balón largo sobre su delantero centro, donde Maguire y Lindelof se hicieron muy fuertes en la defensa del área, el equipo de Solskjaer demostró, como era lógico por otra parte, que está más rodado para estas situaciones. Con Fred y McTominay muy activos en el doble pivote, Maguire y Lindelof controlando su área y Rashford sacudiendo desde el costado, yendo de fuera hacia dentro para salir (pasar, correr, regatear y disparar) siempre con su pie derecho, el Manchester United evidenció lo crucial que es manejar diferentes alternativas que completen el discurso base… Y más en los tiempos que corren.
AdrianBlanco_ 5 diciembre, 2019
Vaya partido hizo ayer este chico ante el Tottenham de Mourinho. Cuando Rashford tiene el día… te acribilla.