Óscar García ha conseguido en dos partidos todo lo que Fran Escribá no consiguió en los anteriores doce. El Celta de Vigo vuelve a ser un equipo coherente conforme a los futbolistas que dispone. Y esto, antes de entrar en más detalle, le ha despejado la pista de aterrizaje a Iago Aspas. Entre el 4-3-3 (en fase ofensiva) y el 4-4-2 (fase defensiva), el ‘nuevo’ Celta 2019/20 ha apostado de partida por una serie de movimientos y directrices impensables hasta hace unas pocas semanas. Sin renunciar al contragolpe más directo, ya que la actual plantilla viguesa cuenta con futbolistas muy duchos a la hora de atacar el espacio, el Celta de Óscar García Junyent se mueve en las dos direcciones en un plan que, a la espera de ir puliendo más los detalles, presiona, defiende y ataca. ‘In that order’.
Óscar García ha apostado por un 4-3-3 como sistema táctico
Porque una de las grandes diferencias entre el Celta de Fran Escribá y el Celta de Óscar García está en su transición defensiva. Mientras que el equipo que acabó la temporada y empezó esta era mucho más reservado tras pérdida, reestructurándose rápidamente en un repliegue medio-bajo cuando no tenía la pelota, este, en cambio, ha demostrado una actitud muchísimo más desafiante a partir de una serie de vigilancias en campo rival. Tanto en el Camp Nou como en La Cerámica, al menos desde el inicio, el Celta ha querido presionar los primeros pases de su rival a través de unos marcajes distribuidos a lo largo y ancho del campo. Una colocación que, lógicamente, no es extensible a los 90 minutos. Pero que, al menos en el fondo (porque también defiende en un 4-4-2), ya rompe con la idiosincrasia de ‘Fran Escribá como entrenador‘. Y no es poca cosa.
Pione Sisto fue de los mejores ante el Villarreal de Javi Calleja
A este Celta ya se le distinguen unos ojos y una boca, mientras que se pueden empezar a intuir otras muchas partes de la cara. Esto no quiere decir que todo el trabajo ya esté hecho, ni nada parecido. Pero sí es un comienzo muy halagüeño para esta nueva etapa. Si bien es cierto que aún está por ver qué propone este Celta en Balaídos o qué ocurre con activos importantes dentro del equipo, como Rafinha y Santi Mina, muy bueno, por ahora, es que Óscar García se haya propuesto recuperar ciertas individualidades para la causa. Además de Iago Aspas, la confianza depositada en Pione Sisto ya está dando sus frutos. Un extremo vertical y directo que, a pie cambiado, por el momento ya ha hecho que Denis Suárez abandone la banda para jugar como interior. Al igual que con Brais Méndez y David Juncá, titulares ambos en el Camp Nou. Óscar García quiere una plantilla amplia. Y si consiguiera recuperar plenamente al danés, en este caso, bien podría ser uno de los mejores ‘fichajes’ del Celta ahora que llega el mercado de invierno, ya que no va especialmente sobrado de extremos rápidos.
iLoveCholo 25 noviembre, 2019
Había ganas de ver a Oscar García en la Liga.
Muy interesante lo que comentas en el articulo:
– Recuperar a Pione le permite tener una amenaza constante, un jugador irregular, pero que si está algo acertado en el regate va a dar mucho al equipo.
– ¿Cómo dará entrada a Rafinha y Mina? Ayer se pudo ver a Mina en banda, ya que entró por Brais en izquierda, pero creo que también habrá la opción de verlo de 9 con Aspas a la izquierda. Lo de Rafinha habrá que esperar pq ayer el medio campo con Lobotka más retrasado y Pape + Denis por delante me gustó mucho.
– El 4-3-3 parece el sistema más acorde a este equipo, sobretodo por configuración de plantilla. Seguiremos atentos a los ajustes que vaya haciendo Oscar.