Por la salud del Barça | Ecos del Balón

Por la salud del Barça

Leo Messi se pasó el fútbol hace tanto tiempo que ya tiene que repetir hasta sus propios goles. Incluidos los de falta. El futbolista argentino es totalmente absurdo. Contrario a la lógica o a la razón. Y anoche, ante el Celta de Vigo, volvió a demostrarlo. La primera mitad de Messi fue una bestialidad. Además de los dos goles, que al final acabaron siendo tres, el ‘10’ del Barça se mostró muy enchufado desde un primer momento. Pronto detectó las dificultades de su equipo para salir jugando desde atrás ante la presión adelantada planteada por Óscar García, y por ello decidió bajar hasta el interior izquierdo del 4-3-3 para ofrecerse por delante de Busquets, en una primera parte en la que, además, presionó y corrió varias veces hacia su propio campo para perseguir a sus rivales en cada salida con espacio.

Sin embargo, esto no habla bien de la salud del Barcelona. Si bien es cierto que la cosa mejoró considerablemente con la entrada de Busquets, que empezó el partido en el banquillo y lo acabó presionando en la frontal del área del Celta, el cuadro de Ernesto Valverde ofreció anoche una de sus peores versiones en bastante tiempo. Y eso que el nivel no es que estuviese por las nubes precisamente. Que Messi esté obligado a hacer estos esfuerzos era, hasta hace nada, algo exclusivo de la selección argentina. Pero el FC Barcelona tiene tal cacao en estos momentos, pues no sabe si atacar directamente a sus rivales o esperarlos un poco más atrás para no tener que pensarse tanto sus ataques, que Leo Messi debió ataviarse con la albiceleste para solventar un partido en el que el Celta, tras el 1-0, concedió demasiadas facilidades. Con la posesión y sin ella.

6 comentarios

  • AdrianBlanco_ 10 noviembre, 2019

    El partido de Messi es brutal. Más allá de los goles, por cómo se echa el equipo a la espalda. Pero el partido me parece muy preocupante para el FC Barcelona. Pero mucho. Vimos al Messi de Argentina en el Camp Nou.

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  • Jorge R 10 noviembre, 2019

    Hola! El Barcelona de esta temporada me sigue pareciendo un equipo aburrido, sin alma y lo que es peor.. sin discurso o guión. Sus partidos son jugadas aisladas o exhibiciones de Messi, que no son normales. Esto, como en temporadas anteriores, dará para dar la cara en LaLiga, pero en Champions League se repetirá el cuento de años anteriores.
    Ayer el Celta mientras aguantó la moral, le puso en bastantes aprietos al Barcelona, luego llegó el de siempre y decidió que no había partido.
    Griezmann todavía no ha entrado en juego, o no sabe muy bien lo que tiene que hacer. Se limita a "no molestar": devolver alguna pared, abrir el campo, presionar salida, etc. Pero creo que se le debe pedir bastante más.
    Dembélé cuando salió lo hizo muy bien y le dió al equipo y a Messi lo que necesitan: agresividad, uno contra uno y desborde. El "pero" es que le falta continuidad, y a lo mejor en el siguiente partido está totalmente desaparecido. Ahora, da gusto ver cómo utiliza las dos piernas para regatear o chutar, es muy estético, y dejó detalles de gran calidad.
    Para mi la nota general del partido del Barcelona debe ser baja.
    Un saludo y gracias por el artículo Adrián.

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  • ruqueyo 10 noviembre, 2019

    Me preocupa mucho este Barcelona, que sin embargo, veo sin dudas el claro favorito a ganar la Liga. Otra cosa será la Champions, donde no te puedes permitir un despiste. Hace unas semanas la sensación era que el Barcelona, con un Messi lesionado o recuperándose de la lesión, había aguantado tanto a Real Madrid como Atlético. Ahora, unas semanas después, y ya con un Messi plenamente recuperado, me preocupan los demás, que no están. En condiciones normales, si este Barça estuviera bien, ya debería tener la liga prácticamente sentenciada, y no es así.

    Griezmann sigue sin demostrar su valía. Dembelé ayer dio buenos síntomas de recuperación, pero aún no sabemos realmente su nivel. Busquets no está bien. Rakitic no sabemos qué pasa con él.

    Sólo tengo dos certezas, Messi y Ter Stegen, sin lugar a dudas, el mejor jugador del mundo, y ahora mismo el portero más en forma. Todo lo demás sin incógnitas.

    No puedo ser optimista, pero siendo resultadista, a pesar de tantas dudas, el equipo es líder en la Liga y tiene el pase a octavos en Champions muy bien encaminado.

    Este año no veo al Barça como el equipo a batir y que los demás luchan todos contra él, pero tampoco veo un equipo que lo sea. A veces el fútbol es caprichoso, y se gana la Champions el año que peor estás. Puede que sea este año el año del Barça.

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  • AdrianBlanco_ 10 noviembre, 2019

    @JorgeR

    ¡Muchas gracias, Jorge! 😀

    Dembélé tiene algo muy valioso más allá de que utilice ambas piernas, que por supuesto siempre es un plus, y es que es de los pocos futbolistas del equipo -sino el único- capaz de dotar al Barcelona de profundidad "sin necesidad" del sistema.

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  • AdrianBlanco_ 10 noviembre, 2019

    @ruqueyo

    Lo de Griezmann es muy preocupante, sí. Es obvio que desde la izquierda está teniendo bastantes dificultades para ser importante. Pero es que tampoco él, a nivel individual, está demostrando ese algo… Es extraño.

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  • ruqueyo 12 noviembre, 2019

    @AdrianBlanco

    Todavía me cuesta encontrar algo que justifique el fichaje del francés, y eso que de inicio, me pareció un gran fichaje. Pero ni lo veo integrado en el equipo, ni siquiera, como tú dices, demuestra algo individualmente. Si al menos lo viera desplegar jugadas individuales que dieran al equipo un plus de resultados, me callaría todo lo demás, pero es no. Dembelé por ejemplo, tiene eso, cuando sale, y cuando está entonado sí aporta todo eso, el gran problema de este francés, es su poca continuidad, y supongo que el club no ha querido desprenderse de él esperando a que esa continuidad llegue en algún momento, porque un Dembelé entonado es un jugador resolutivo y que aporta al equipo algo que muy pocos jugadores aportan, desajustes en el rival, peligro, creatividad,….

    Griezmann sigue muy lejos de todo eso. El poco contento que queda es que al menos se le ve con buena actitud e implicación, y que defiende cuando el rival tiene el balón. Poco balance positivo para un jugador así.

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