El Valencia CF de Albert Celades ha llegado a su primer parón por selecciones con la certeza de que su existencia sigue siendo mucho más llevadera cuando puede correr hacia la portería contraria. Ante Athletic Club y Deportivo Alavés, sus dos últimas victorias en esta Liga, el cuadro che pudo conformar su estrategia desde un fondo y una forma ya inherentes a la etapa de Marcelino García Toral en Mestalla. De nuevo sobre un 4-4-2 en línea, como organizaba el asturiano cotidianamente a su Valencia CF, alejándose así -por ahora- del 4-3-3 con el que asaltó Stamford Bridge pero también empató ante Leganés y Getafe, Celades ha entendido este momento como una oportunidad para normalizar todos los cauces reutilizando un plan que el equipo conserva de manera interiorizada.
Albert Celades ha vuelto al 4-4-2 en el momento más indicado
Respetando la forma pero retocando ciertas cosas que tienen que ver con el fondo, este Valencia se está sirviendo de los automatismos de la anterior etapa para ganar tiempo y confianza, las dos cosas al mismo tiempo, para enderezar una situación que hace pocas semanas, tras la salida de Marcelino, amenazó seriamente con arrasar todo por cuanto había luchado el Valencia CF estos años. Una postura muy inteligente en el caso del propio Celades, ya que, descubiertas muy pronto las dificultades a nivel de sistema, ha sido el primero en comprender que el tiempo debe ganárselo en el campo. Y que para ello, sin mucho margen para los experimentos, nada mejor que darle continuidad a una idea que forma parte de ese vestuario. E incluso de la organización deportiva.
Rodrigo le está dando muchas facilidades a su nuevo entrenador
Así las cosas, ante Athletic, Ajax y Alavés, en estos tres encuentros en los que el Valencia ha vuelto a organizarse desde un 4-4-2 en línea, Celades ha apostado por situar en los extremos a dos futbolistas que sienten la demarcación de una forma mucho más natural que Rodrigo, que arrancó desde la banda del 4-3-3 en Londres y en los dos posteriores partidos. Cheryshev, Guedes y Ferrán, los extremos del 4-4-2 en esta semana y media, han actuado de una forma parecida a como lo hacían con Marcelino pocos meses antes. Y las relaciones entre todas las partes del sistema, en líneas generales, han sido mucho más fluidas, como es lógico por otra parte, que en la fase beta del 4-3-3. Empezando por Dani Parejo, que dentro del 4-4-2 ha recuperado su perfil derecho, y siguiendo con Rodrigo Moreno, que desde el centro hacia la banda, y no a la inversa, actúa de un modo más natural a nivel de esquema.
De hecho, aunque sea algo esbozado a mano alzada, esta está siendo una de las grandes apuestas de Celades desde su llegada: el hecho de que Rodrigo, ya sea desde el 4-3-3 o como segundo punta en el 4-4-2, está pisando con más asiduidad que antaño el costado derecho. Ante el Alavés de Asier Garitano, sin ir más lejos, el internacional español trazó una serie de desmarques dentro-fuera sobre dicho sector que, moviéndose por delante de Ferrán Torres, y actuando antes de recibir el balón al pie, le dieron bastante amplitud y profundidad al Valencia en su transición ofensiva. Y es que Rodrigo es ahora mismo, por encima incluso del propio Dani Parejo, la individualidad que más tiempo puede darle a Celades. Por lo bien que lo está entendiendo todo y por lo fácil que se lo está poniendo al resto de piezas: a Parejo y Coquelin, ofreciéndoles todo tipo de soluciones por delante de sus pases, o a Maxi Gómez, al que está encontrando con bastante facilidad en los últimos metros del dibujo.
AdrianBlanco_ 8 octubre, 2019
¿Qué os está pareciendo el Valencia? ¿Os está convenciendo lo que estamos viendo? 😀