Aunque solo jugó media hora, Álvaro Morata fue lo más noticiable de un España-Luxemburgo previsible en guion y resultado. Al delantero de la Juventus le tocó vivir en sus carnes lo que es ser ariete en la España de Del Bosque. A día de hoy, todo apunta a que el “9” de la Selección en la Eurocopa saldría de su competencia con Diego Costa. Y por sensaciones, se diría que Álvaro va ganando.
La verdad es que, si lo pensamos, es muy posible que nos estemos perdiendo a Morata. Haberle contemplado en su momento como quinto atacante del Madrid de Ancelotti condiciona la visión de una realidad incuestionable: Morata lleva meses marcando diferencias ante los mejores equipos del mundo. Madrid, Barcelona, City o Sevilla han encajado goles de todos los colores del punta madrileño. Para la Juventus, el club más potente de Italia, Álvaro es un jugador troncal, necesario para competir en cualquier escenario continental.
Morata transmite una confianza típica de futbolista importante
Ese jugador que contamos recibe de Del Bosque las mismas instrucciones que Diego Costa: jugar de espaldas entre los centrales rivales y tirar el máximo número de desmarques posible. En otras palabras, mezclar profundidad con apoyos, una tarea que tiene amargado al hispano-brasileño del Chelsea. Anoche, sin embargo, vimos a Álvaro mucho más cómodo en ese rol, tirando rupturas que no salían pero casi y combinando bien en pocos metros –el gran defecto de Costa–. Se diría que su mayor confianza repercute en su precisión técnica. La impresión general está favoreciendo al de la Juve.
PD. Del banquillo salió Paco Alcácer, cuyos movimientos no parecen ser los que demandará el técnico en las noches de élite, pero que es el delantero que más tantos pesca en el área pequeña. Ayer marcó otros dos y ya suma 5 en 7 partidos. Metiendo churri-goles es el mejor.
Abel Rojas 10 octubre, 2015
Ya no es solo el tema de los goles. En la Final de la Champions, que pasa por ser siempre el partido con más nivel del año futbolístico, el hombre que hizo que el equipo "pequeño" pudiera ganarle al "grande" fue él. Morata fue superior a sus marcadores y sembró peligro. Cuanto más superior era el Barça, más crecía Morata.
Si fuese un polaco fichado por el Dortmund y luego por la Juventus, valoraríamos muchísimo más a Morata. Sin ir más lejos, Diego Costa fue capital para ganar una Liga BBVA. Potencialmente y a tenor de lo visto en el último año y medio, ¿qué puede hacer Diego Costa que no pueda hacer Álvaro Morata?
No digo que no haya nada. Solo lanzo la pregunto.