La mejor Real Sociedad de este inicio de campeonato logró, por primera vez en este curso, arrebatar dominio y posesión al emergente Valencia de Nuno. Fundamentando su actuación en una intensidad elevada y sostenida en la presión tras pérdida y una precisión con la pelota poco común entre tanta agresividad, los donostiarras recordaron en varias fases del encuentro a la versátil y enérgica versión de Montanier. Sinónimo de todo esto sería decir que dejó a Parejo y Gomes sin pasársela. Desde ahí, todo lo demás.
Una de las facetas que los entrenadores más valoran y más hincapié ponen en valorarla, es decir, haciéndolo ante un micro, es la continuidad en el juego que desarrollan o no sus equipos. Y es lo que les venía faltando a los ‘txuriurdines’ en La Real halló el buen caminolas cinco jornadas anteriores y que recuperó en su totalidad en los primeros 45 minutos de ayer. Como en el fútbol es muy difícil que tal concepto se comparta, la Real dejó sin apenas continuidad a un Valencia que era uno de los colmos del campeonato en ello. Los de Arrasate arrancaron con la intención de tener la pelota y de robar y no esperar cuando los chés tuvieran oportunidad de salir desde atrás. Ambas ideas se ejecutaron con exactitud y en 15 minutos exigieron lo suyo a Alves, con dos estiradas de mérito.
La Real dominó toda la primera parte y se marchó empatando
Pero a los 15 minutos iban 0-1. En la primera progresión visitante, Barragán conectó con Rodrigo, éste la puso templada a la espalda de Elustondo, Alcácer la dejó en bandeja de plata y Carles Gil la incrustó. Como una falsa alarma, el partido dobló los 15 minutos iniciales y los convirtió en 30 muy similares. Canales por izquierda y Vela y Agirretxe por derecha juntaban y soltaban la pelota en constante ventaja. Saques de esquina, calidad en la posesión y recuperación fantástica para no dejar transitar a un rival que también tiene recursos para, tras adelantarse, ponerse a correr. El Valencia supo aguantar en su área y no dejó errores que aprovechar.
Nuno, obivamente, movió todo. André Gomes dejó sitio a Filipe Augusto, Feghouli le dio otro aire a su banda en lugar de Gil y desde la seguridad de Augusto y Fuego contuvo a una Real algo más apagada y esperando una oportunidad puntual antes que una búsqueda permanente. La precisión disminuyó y el balón ya viajaba de lado a lado, así que como el Valencia disponía de más fuelle, aparecieron Sofiane y Gayá para coquetear con el área contraria. El final del encuentro se quedó sin pausa pero sin premio.
Abel Rojas 29 septiembre, 2014
Me gustó bastante Canales en la izquierda. No brilló, no tuvo la presencia que en otras ocasiones, pero me gustó el control que dio al juego de la Real. La Real atacaba sobre todo por la derecha y eso hacía que el lado de Canales fuese el descargado, y en vez de aprovecharlo para profundizar y atacar, lo usó para templar y dominar, y creo que eso ayudó a la Real a que, por ejemplo, el Valencia solo saliera una vez en 45 minutos.
Me pareció un muy buen planteamiento de Arrasate con mucho peso en el partido.