Convengamos que a la mejor Brasil de Scolari la vimos en aquella batalla frente a España. Era la final de la Copa Confederaciones y los matices de su victoria fueron claros. Brasil se adelantó al primer minuto de juego y a partir de ahí pudo ser lo que le gusta: un equipo de presión salvaje, emotividad y salida rápida. Esa es la Brasil idílica, contra la que seguramente no habría respuesta en esta Copa del Mundo, pero que no siempre puede estar presente. A veces toca ofrecer algo distinto, algo más pausado.
La nueva posición de Neymar ha cambiado a Brasil
Sin creatividad en su doble pivote ni mediapuntas relacionados con el juego, Brasil adoptó a Marcelo como su cerebro. El lateral del Real Madrid la tenía en el pie más tiempo que cualquier otro futbolista amarillo. A su lado, en la izquierda, estaba Neymar. Es posible que el azulgrana no tenga en sus genes esa “lentitud organizativa” que tenía, por ejemplo, su ídolo Robinho. Al fin y al cabo, Neymar es mucho más capaz en lo individual. Si la coge puede regatearse a dos y marcar. Con todo, Ney era reflexión, segundos en campo contrario y calma. De su dupla con Marcelo, Brasil sacaba muchas cosas.
Con la pelota «siempre» en el costado zurdo, Luiz Gustavo y David Luiz pasaban a vivir como más les agrada: activos y enchufados, listos para anticipar. En el centro esperaba Óscar, ese hombre que solo es 100% coherente como mediapunta. Se movía en torno a Neymar. Y en la banda derecha, mucha gente esperando: un Paulinho con espacio para llegar, un Hulk adorando su diagonal hacia puerta y un Alves atado y prudente. Que no suene perfecto, que no era así: Brasil resultaba lenta y torpe a menudo, pero también sabía lo que hacía.
La nueva posición de Neymar ha cambiado a Brasil
El paso de Neymar de la izquierda al centro ha supuesto un cambio principal: ahora Brasil no tiene lado fuerte. Se ataca más por la izquierda que por la derecha porque Marcelo hoy es más que el flojísimo Alves, pero no por voluntad táctica. Y lo que es peor: la conexión del carrilero madridista con Neymar ha desaparecido. No existe. Marcelo y Ney ya no se la pasan, y sin este matrimonio Brasil no tiene forma de pararse un poco en terreno rival. Esto, de por sí relevante, está siendo decisivo en una Brasil hipertensa que no ha controlado ni un solo partido en este Mundial.
¿Cuáles han sido entonces los beneficios de la modificación? A priori, viendo cifras, podríamos decir que acercar a Neymar al área equivale a goles, a muchos goles. No obstante, debemos recordar que el azulgrana también los marcó en la Confederaciones partiendo (que no estando) desde la izquierda. A nivel futbolístico, tampoco está claro que Neymar crezca. Goza de total libertad (positivo en un fenómeno así) pero ante México y Chile, los adversarios más férreos, el crack tuvo problemas para recibir entre líneas y no pudo brillar. En cuanto a sus compañeros, solo Hulk (que permuta de banda casi a su gusto) parece potenciado por la medida. Así pues, nos preguntamos: ¿le ha salido bien a Scolari desencadenar por completo a Neymar?
Pablo 3 julio, 2014
No se si viene al caso pero hoy (o ayer, ya ni se) Neymar hizo unas declaraciones muy curiosas sobre el estilo de juego del equipo. En realidad, dio la sensación de que Scolari se vistió de Xavier y le controlaba la mente mientras declaraba. Lo que Neymar dijo fue algo así como que no importaba dar espectáculo, que se conformaba ganando medio a cero y que el tema de los caños, las gambetas y los sombreros estaba muy bien para otro momento…
Creo que esto resume un poco la tensión que vive este chico en particular y la selección en general: una presión enorme, muy difícil de manejar y que creo que Brasil no tiene, individualmente, los elementos para sobrellevarla.
Por el lado de Colombia, a mi Pekerman siempre me dio la sensación de que le falta algo para estas instancias. Veremos. Me parece que se va a ver un duelo de equipos muy atados, muy condicionados.