Han pasado más de tres meses desde que el Málaga lograra el derecho a competir la previa de la Liga de Campeones. Esta noche debe rematar la faena, aunque no tenga un rematador. Ahí yacerá su segundo problema, tras el propio Panathinaikos FC. El tercero será creerse lo que está haciendo. Le va a costar. Málaga es una ciudad desafortunada en lo futbolístico. Su club ha cambiado de nombre infinidad de veces, la desaparición de 1992 aún no se borró de La Rosaleda y ahora… ésto. Después de un año celestial, cuando apenas comenzaba a superarse un escepticismo casi patológico, tres meses en el infierno. La afición debe saberse merecedora de la gloria y mandar al loable vestuario el mensaje de que el sueño es posible, y justo. Toulalan y Pellegrini, convertido simplemente en el Málaga CF a día de hoy, serán la maestría entre novatos. El sostén de una ilusión.
Volviendo al principio, las bajas de Rondón y Van Nistelrooy han dejado a Pellegrini sin delantero centro. Al unir la de Cazorla, el extravío de golPortillo ocupa el espacio que dejó Cazorla se tasa en 24 tantos, una suma excesiva y neta, pues no hay nuevas caras en el plantel. La parte positiva es que el colectivo no ha perdido capacidad de dominio. De hecho, es al revés. Ha cuajado una gran pretemporada y un debut más que correcto en Balaídos, patentando que el segundo año de proyecto tiene ventajas por el mero hecho de serlo. El 4-4-2 se mantiene, Toulalan cambia de compañero según convenga -hoy jugará Maresca-, Portillo releva a Cazorla en la línea de Isco y, arriba, Seba forma junto a Joaquín. Sobre el equilibrio entre Portillo y Joaquín en la derecha (salen, entran, suben y bajan sin cesar) se cimientan superioridades muy interesantes.
Digamos que su fútbol no se está muriendo por carecer de referencia. Mejoraría mucho con ella, sin duda, pero el nivel técnico de Toulalan,El «falso 9″ es una opción más que factible Portillo, Isco y Joaquín y el notable trabajo de Pellegrini con Monreal y Gámez compensan, al menos de manera superficial, ese factor. Ocurre algo más simple: el Málaga no mete goles. Necesita volumen ofensivo de goleada para anotar el primero, y eso es un drama. Hoy, sin Seba, las alternativas en la punta son tres. Por un lado, la más natural, Juanmi. Con 17 años era mejor que ahora con 19. La segunda opción es Olinga, el niño del récord. Es veloz y tiene suerte, pero jugar aún no sabe. En último tercio se valora el falso 9, con Isco, Buonanotte o, más probable, Portillo. Como España, pero muchísimo, muchísimo peor y con piel de novatillo. Olería regular.
Toulalan, jugador absolutamente superior, debe ser decisivo.
La variante del falso 9 podría incluir a Eliseu en el 11 titular -lo haría en condiciones normales, si bien los rumores de traspaso al SL Benfica hacen dudar de que lo sean-, que su parte buena tendría. Es un tipo concreto, punzante y con despliegue, que chutaría a puerta un par de veces -dos buenos chuts son un tesoro para este Málaga- y ayudaría a Toulalan a la hora de transitar. Jérémy se dejará la vida hoy. La saca, organiza, se suma, domina segunda jugada, corta, apoya a los centrales… Es el mejor y es el líder, y crece cuando, como viene sucediendo, el Málaga asienta el ataque con poso arriba. Demichelis, quien por experiencia debería ser una fortaleza, y Weligton, cuya edad se nota sobre todo en agosto, le dificultarán el trabajo. Su espalda es un boquete sin solución; Jesualdo Ferreira seguro que sonrió al ver lo que les hizo Aspas. Caballero, templado y talentoso, suele parar. La portería imbatida dependerá de él. El Panathinaikos, experto, llegará.
@sepioes 22 agosto, 2012
Francamente, Abel, creo que tienen pocas opciones.