Rafinha, Do Nascimento Vigo | Ecos del Balón

Rafinha, Do Nascimento Vigo


Hace seis años, Luis Enrique Martínez construyó un equipo que en ‘Ecos del Balón’ tratamos con continuidad y profundidad. Uno de esos colectivos que la Liga mostraría al exterior para explicar qué la hace diferente, por partida doble. Primero porque tenía una personalidad y una identidad arrebatadoras dentro del campeonato, siendo, sin duda, patrimonio propio, y sobre todo porque Balaídos sabía que estaba ante algo suyo. El Celta de Vigo, como el Betis, el Sevilla o el Athletic de Bilbao, reconocen rápidamente qué equipo responde a su historia, reciente o no tan reciente. Krohn-Delhi, Augusto Fernández, Nolito, Orellana, Mallo, Jonny y Rafinha Alcántara fueron y son memoria del celtismo.

Como en 2014, Rafinha ocupará la banda derecha, pero de un modo completamente diferente a aquel proyecto

Seis años después, el menor de los Alcántara, hijo de la leyenda Mazinho, vuelve a ocupar la banda derecha de Balaídos. Y las cosas han cambiado mucho, tanto en el equipo, a nivel táctico, como en el jugador, mucho más maduro, lesiones, experiencia y crecimiento mediante. Lo que no ha cambiado es la idoneidad de su llegada. Si Rafinha fue en aquel equipo el extremo con desborde, electricidad y descaro que hoy se le adivina a Brais Mendez, la segunda etapa de Rafinha viene marcada por la calidad, mesura y poso que su juego ha ganado con el paso de los años. En el equipo de Iago Aspas, y tras una temporada en la que el Celta sufrió muchísimo por su falta de control, equilibrio y consistencia, su papel, otra vez, y de manera muy diferente, va a ser fundamental.

Como ya está dejando entrever el correspondiente rol de Denis Suárez, el movimiento análogo de Rafinha guarda ciertas similitudes con el de Denis. Los dos llegan de nuevo tras haber consolidado algunas características de su juego, funcionando como posibles conectores no sólo de dos líneas del dibujo y dos franjas del terreno sino conectando áreas esenciales del juego en su conjunto, acercando el siempre perseguido concepto de continuidad entre una salida de balón y una ocasión de gol, entre una fase del juego y la siguiente. Si lo meramente técnico, en un gran porcentaje, se aprende en las etapas formativas, no es sino en la suma de experiencias y adversidades, la pura competición y competencia, donde se naturaliza lo que se debe hacer. Así, las bandas del Celta están ahora ocupadas por tipos que están en puntos intermedios y vitales del juego, en puntos intermedios del exceso y del defecto, del vicio y del error. La ansiada madurez en relación con el juego.

Su toma de decisiones y la calidad de su juego atacan una de las carencias del Celta: la continuidad en el juego

No hay que obviar el componente social que suma Rafinha, y que añadirá una buena cantidad de identidad e identificación a las que ya transmiten Aspas, Denis, Brais o Mina. Desde ese valor añadido, el zurdo brasileño rellena un espacio del campo en el que caben muchas más posibilidades de las que hasta hoy existían. Con Denis y Rafinha a pie cambiado el juego debería progresar de una manera mucho más fluida, con libertad para ambos en todo el eje horizontal, por delante de los mediocentros, activando espacios para los laterales y estando siempre cerca del gran generador y estrella del equipo, Iago Aspas. Dada la calidad de sus movimientos y su posicionamiento, su calidad para retener la pelota, orientar las jugadas siempre en favor de mantener la posesión y hacerla avanzar, y su talento para elevar la capacidad para el pase en los últimos metros, el Celta debería de olvidar con Alcántara buena parte de sus males, los que le hacían ser un equipo muy discontinuo, expuesto a la verticalidad sin demasiada alternativa. Balaídos reclamaba más pausa, reflexión y buenas decisiones. Y Rafinha está muy cerca de ser todo lo que necesitaban.


9 comentarios

  • AArroyer 3 septiembre, 2019

    Hay muy pocos equipos que necesiten tanto que sus atacantes tomen buenas decisiones como el Celta.

    Balaídos viene mostrándose muy frágil atrás, por sistema y por nivel individual. Necesita constantemente una continuidad y una estructura que le ayude a moverse bien tras la pérdida, ordenarse bien y juntar a los buenos. Y es que Rafinha es justo esa madurez a la hora de ir sumando buenas acciones, bien medidas, con buenos movimientos y mucha inteligencia. Es que es un fichaje perfecto. Sólo necesitan que Iago y Rafinha jueguen 30 partidos, sin muchas lesiones y que el 'Toro' se adapte bien. Si sumamos a Denis en izquierda, y a Mina y Brais desde el banquillo, el tema es radicalmente opuesto a la 18-19.

    Respond
  • Enrique Borda 3 septiembre, 2019

    Ves al Toro por delante de Mina? En teoría el titular debe ser Mina no?

    Respond
  • AArroyer 3 septiembre, 2019

    @Enrique Borda

    Yo con Mina tengo un pequeño problema, y es que por el tipo de jugador que es, se queda un poquito a medias como '9' puro, aunque sea un gran rematador y se desmarca muy bien, pero faltándole registros, y tampoco puede ser 2º punta porque no es tan fluido y porque, obvio, está Iago Aspas. Y ya me quedó esa sensación, reforzada, cuando se hizo con la titularidad en el Valencia como el '9' de Rodrigo, porque para mí, a nueve meses vista, no me parece un tipo indiscutible. Lo que sí que creo es que es un plus tremendo en dinámicas concretas, saliendo desde el banquillo, teniendo sus rachas, en planteamientos donde también el Celta tenga menos balón y Mina sea el '9' de los contragolpes, me parece un jugador que sume muchos minutos y que vaya ganando presencia por planes concretos o semanas de mucha inspiración. Creo que 'Toro' da más continuidad al Celta de Maxi.

    Respond
  • Diego 4 septiembre, 2019

    Acerca de Mina y el Toro, no se finalmente quien se hará con el puesto, dependerá en gran medida de la adaptación al futbol español del Toro, y del nivel que pueda dar. A buen nivel estoy de acuerdo, el Celta tiene más sentido con el que con Mina. Pero habrá que ver hasta que punto tiene gol, porque de eso ya sabemos que Mina va sobrado. A corto plazo, y una vez recuperado de la lesión, imagino que Mina se hará con el puesto, debido fundamentalmente a la insuficiente pretemporada del Toro, y sus constantes viajes a Uruguay. Físicamente el Toro está horrible hasta ahora.

    Respond
  • umas21 4 septiembre, 2019

    Para mí el regreso de Rafinha plantea una única incognita en el medio/largo plazo del celta, ¿pueden convivir rafinha y brais en el mismo once?

    Yo creo que después de la temporada pasada Brais no necesita sentirse suplente y que probablemente le cueste asumir un papel de revulsivo, algo que no sé como podría afectar a su progresión. Teniendo en cuenta que es el proyecto más prometedor que tiene el celta entre manos desde el propio denis me parecería una decisión poco acertada no hacer todo lo posible para que el chico crezca.

    Dicho esto tampoco veo a Rafinha jugando en un doble pivote y más siendo suarez el extremo izquierdo.

    Creéis que Aspas puede volver a jugar como 9 referencia y que sean Rafinha o Brais los que jueguen de segunda punta?
    Podría Escribá intentar apostar por el 4-3-3 para jugar con ambos como interiores (aunque eso significase sentar a Lobotka)?

    Respond
  • AArroyer 4 septiembre, 2019

    Yo creo que Escribá tiene que administrar y manejar mucho talento y eso le hará ser más flexible en sus ideas, no en vano ya ha utilizado mucho el 4-2-3-1 y puede variar puntualmente al 4-1-4-1 para meter a Rafinha de interior y dar espacio a Brais, aunque no creo que como interior. Yo lo que veo menos probable es lo de Aspas en solitario arriba, sí veo más facilidad de alternar a Mina y Toro como acompañante de Iago. En cualquier caso, muchas variantes.

    Respond
  • Diego 4 septiembre, 2019

    @umas21 El mejor Lobotka que he visto ha sido de pivote único acompañado de dos interiores, así que de pasar el Celta a un 4-3-3 no sería a Lobotka a quien sentaría. Brais-Lobo-Rafinha con Denis-Mina-Aspas sería mi apuesta. Aunque claro, sin Okay en el 11 las dudas son las de siempre en el Celta, como recuperar la posesión?

    Respond
  • umas21 4 septiembre, 2019

    @AArroyer

    Está claro que el 4-2-3-1 es un esquema que gusta mucho a escribá pero ahí Aspas tiene que jugar o arriba solo o en banda derecha y si juega en banda es la misma situación que el 4-4-2, sigo sin ver a brais y rafinha juntos en el once.

    El 4-2-3-1 a mí me suena bien si se opta por Iago arriba y Mina en banda con mucho intercambio entre los dos, en ese sentido la diagonal fuera-dentro de Mina me parece muy potente pero en el resto se queda un poco limitado y no tiene la finura como para agredir con balón desde la banda.

    @Diego

    Sobre el papel suena de lujo pero realmente ves factible ese 4-3-3/4-1-4-1? a mí me genera muchas dudas a nivel defensivo porque si los tres del medio son lobo-rafinha-brais, en banda derecha van a jugar aspas o mina y eso es sumar más fragilidad defensiva…

    Reto interesante el de Escribá este año, veremos que soluciones consigue aportar a una plantilla que por talento debería estar luchando por una plaza de europa league

    Respond
  • Diego 6 septiembre, 2019

    @umas21
    Por la banda derecha no me preocuparía. Mina es trabajador, y Aspas cuando actuó en ese puesto en el 4-3-3 de berizzo llegaba hasta linea de fondo propia si hacía falta. Y del medio campo Lobo y Rafa (si no le da la lata su rodilla) creo que si podrían aguantar bien, me genera más dudas Brais, que si se puede mostrar intenso, pero a costa de cambiarle en el minuto 70. Desde luego que el Augusto-Tucu-Wass era un medio de mucho más trabajo a priori, pero cuando el que entraba era el Chelo díaz diría que al contrario. El chileno manejaba el equipo de forma espectacular, pero defensivamente aportaba menos que cualquiera de los medios actuales del Celta, y por mucho.

    Respond

¿Qué opinas?

Ecosdelbalon.com - - Política de Cookies.