Saber jugar en ventaja
Eusebio Sacristán: “A veces es lo que pasa: cuando tienes una ventaja clara, luego no es fácil saber cómo jugar el partido. Por un lado, dudas de si seguir yendo a por más. Por el otro, inconscientemente ese resultado te hace querer conservarlo. Y ese querer conservarlo nos ha salido muy caro. El irnos para atrás ha permitido al Dépor que sacase lo mejor de sí y que generase muchos problemas cerca de nuestra área. Lo positivo para nosotros es que, tras ver cómo se le escapaba algo que tenía en las manos, el equipo ha vuelto a querer y, al final, lo ha logrado”.
Aunque suene sorprendente, la temprana ventaja no le sentó muy bien a la Real Sociedad. Se mostró más temerosa, le costó tener el balón ante la presión de Andone+Adrián y dejó de intentar controlar el partido en campo rival como lo suele hacer. Asier Illarramendi, por poner un ejemplo, estaba interviniendo muy poco. Y David Zurutuza, directamente, había pasado desapercibido. Pero conforme el Dépor empató, el partido se calmó y Eusebio tomó cartas en el asunto, todo cambió… ¡Para bien! El técnico txuri-urdin decidió renovar el ataque dando entrada a Canales (por Juanmi) y a Carlos Vela (por Januzaj). Un movimiento éste con el que multiplicó las líneas de pase alrededor de Illarramendi y, por encima de todo, de un Xabi Prieto que estuvo monumental juntando a sus compañeros. De esta manera, con el balón como elemento de control y organización como es habitual en la Real Sociedad, el equipo de Eusebio jugó con la ansiedad del Dépor hasta encontrar el camino en la banda de un superado Luisinho. Resultó curioso, pero la Real jugó mejor y más calmada después de recibir dos goles que cuando los marcó.
Una nueva posición para Sarabia
Eduardo Berizzo: “La actuación de Pablo Sarabia es destacada. Ha jugado en una posición, como mediocampista mixto, en la que ha mostrado garantías defensivas y también ha construido el juego con muchísima fluidez. El tacón del último gol le describe: es un jugador talentoso y generoso. Ocupa muchas posiciones y, por eso, también es muy valioso en la plantilla”.
Desde que llegara al Sevilla y conociera una de las características que mejor definen a los técnicos bielsistas, Pablo Sarabia ha jugado de prácticamente todo salvo de mediapunta, la posición para la que parecía haber nacido. Como extremo diestro, carrilero zurdo… Y, ahora, como interior izquierdo. Jugando un poco por delante de N’Zonzi y un poco por detrás de Ganso, Sarabia fue fundamental en la victoria del Sevilla ante el Eibar de tres maneras muy distintas: apoyando en la salida, sumando pases en creación y, sobre todo, acelerando en zona de trescuartos. Así, aun siendo algo diferente, Berizzo ha podido encontrar en Sarabia al relevo ideal de Banega.
Williams para Ziganda
Kuko Ziganda: “Estoy convencido de que tiene ganas de hacer gol, porque lo conozco, pero es que es un jugador… Es que es muy bueno. Si lo pones arribas, sé que va a tener dos o tres ocasiones de gol. Las tuvo en Liverpool y la metió, las tuvo en Getafe y no metió por centímetros. Pero es que si le pones en banda, también sé que va a dar asistencias de gol. Iñaki es una garantía. Es un futbolista desequilibraste. Lo que sucede es que tenemos que combinarlo en función de los jugadores que tenemos. La suerte es que donde juegue desequilibra y que siempre nos permite jugar con diferentes combinaciones según los partidos”.
El crecimiento de Iñaki Williams tiene dos velocidades: el que le hace mejor extremo derecho y el que le hace mejor futbolista. En el primer caso, como pudimos comprobar ante el Girona, el extremo vizcaíno cada vez maneja mejor los requisitos técnicos de la banda: su regate exterior es más eficaz y, por encima de todo, sus centros han ganado en peligro. Ya ni siquiera necesita exhibir su velocidad con tanta frecuencia como en 2015. Sin embargo, esto también destapa que Iñaki parece estar para más. Ya lo dice Kuko Ziganda: «No tengo duda de que va a hacer goles; le conozco y tiene gol». El técnico con el que despuntara como delantero centro, sabe que el futuro más sugerente está en línea recta hacia la portería. Pero, mientras Aritz Aduriz siga con este promedio goleador, tanto a Iñaki Williams como a su amigo Muniain les va a tocar partir desde fuera.
Foto: LLUIS GENE/AFP/Getty Images
Abel Rojas 11 septiembre, 2017
Me quedo con lo de Iñaki Williams. La pareja Muniain-Williams está siendo un absoluto escándalo en este arranque de Liga y ya ha superado, en mi opinión, la trascendencia de Aduriz en el nuevo Athletic Club. Para mí, está jugando en el lugar que menos le favorece, pero la realidad es que marca unas diferencias brutales también desde esa banda derecha. Futbolista, hoy por hoy, muy difícil de defender para cualquier sistema defensivo español.