El proyecto de Quique Setién sigue perfilándose con coherencia. El último futbolista en emigrar al Benito Villamarín es el talentoso Andrés Guardado, que a su perfecta compatibilidad con la idea de juego defendida por su nuevo entrenador aúna una experiencia en competiciones de máximo nivel que hace ver al Real Betis 2017/18 no sólo como un equipo bonito, sino también como uno ambicioso.
Del Guardado que dejó España tras pasar por Coruña y Valencia no queda casi nada. Aquel era un extremo o volante izquierdo muy técnico al que le faltaba una punta de explosividad para terminar de ser determinante, y que se dio a sí mismo un perfil más asociativo, más pausado, que quizá le restó proyección pero no interés. Al revés. Descubrir ese cariz cerebral suyo llevó a sus seleccionadores a probarlo más por dentro, de interior, hasta que luego en Holanda, Phillip Cocu lo situó como mediocentro de todo un PSV Eindhoven.
En México se labra mucho la táctica ofensiva. A Andrés, se le nota.
Como pivote, el as mexicano ha sido crucial en las dos Eredivisies ganadas por su club, así como en las buenas impresiones dejadas por este en la Champions. Sin embargo, en este Real Betis podría ir incluso un paso más allá.
Aunque Cocu viviera sus mejores años como futbolista en el Barça de Van Gaal y se suscriba a la cultura del juego de posición como canon para colocar a sus hombres sobre el césped, la importancia que él ha dado a la posesión del balón no ha sido tan extrema como la que le concede Quique Setién. Cocu pondera una calidad alta en el circuito de pases de su equipo, pero para él no resulta clave que su equipo acapare la pelota; no le importa juntarse y esperar en su propio campo. Es decir, en lo referido a la posesión, busca y exige calidad, pero no cantidad. Setién, sin ser tan extremista como a veces parece, sí anhela más protagonismo. Y en un conjunto que promedie un 60% con una ocupación de espacios que favorezca la fluidez en la circulación, Guardado de mediocentro puede causar un impacto cultural en la Liga perfectamente equiparable al de Roque Mesa en la primera vuelta de la 2016/17. Y probablemente, así se lo haya contado el entrenador. De ahí la siguiente confesión a MARCA:
«En un principio no lo tenía muy claro, pero ya tenía una oferta firme sobre la mesa y estaba muy avanzada. Ellos tomaron la decisión de seguir adelante aun así, me llamó por teléfono el míster, Quique Setién, y a partir de ahí cambió mi perspectiva. Me expuso todo lo que piensa de mí, del nuevo proyecto, de lo que podemos lograr, y ser parte de este proyecto me ilusionó mucho y cambiaron mucho las cosas. Creo que tomé la mejor decisión.»
A su técnica y poso añade un conocimiento del juego avanzado y una gran facilidad para entender sistemas, en parte debido a que en México se trabaja mucho la táctica ofensiva. Si todo va como cabe esperar, sería sorprendente que Andrés Guardado no acabase el campeonato entre sus mejores pasadores. Va a ser un gusto verle.
Foto: YURI CORTEZ/AFP/Getty Images
Abel Rojas 11 julio, 2017
Fichaje que se sitúa ahora mismo en mi TOP 5 de fichajes favoritos del verano.
Creo que va a liarla en la Liga.