El FC Barcelona venció 0-2 al BATE Borisov. Lo hizo sin complicaciones y exhibiendo al fin una solidez notable y constante durante todo el choque. Esta fue la primera noticia positiva para Luis Enrique: su equipo nunca estuvo cerca de recibir gol. La otra tiene nombre y apellidos: Neymar Da Silva Jr. Tras sus cuatro goles al Rayo, el crack volvió a salirse, ejerciendo más de líder que nunca.
El FC Barcelona fue sólido por primera vez esta temporada
Los primeros 45 minutos fueron, con casi toda probabilidad, los mejores del Barça en el presente curso. La estadística lo decía todo: 13 disparos realizados por cero de un BATE que directamente no existió. El Barça se mostróNeymar fue casi todo. Y Alves intensísimo en su presión y el conjunto bielorruso apenas pudo acercarse a Ter Stegen. En ataque, los de Luis Enrique se basaron en dos elementos destacados. Por un lado, por supuesto Neymar, que estuvo acaparador y resolutivo. El crack fue mezclando la zona en la que entraba en contacto con la bola. Si recibía en banda, encaraba y se iba. Si se metía al medio, se juntaba con todos y seguía desequilibrando. Solo le faltó un gol que mereció.
El otro foco de fútbol fue Alves, más interior derecho que nunca este año. Dani vivió pegado a Mascherano y fue el encargado de tenerla en el pie en ese sector. Lucho ató a Munir a la banda y mandó a Sergi Roberto (Rakitic luego) a tirar desmarques. Lo curioso es que Dani, a pesar del rol asignado, no le negó a los suyos más de un desmarque en profundidad hasta línea de fondo, la mayoría infructuosos –la edad no perdona– pero de gran valor táctico. Alves estaba siendo Alves.
Neymar jugó un partido muy completo, pisando diferentes zonas
Pese al volumen de posesión, el Barça encontró el gol en un robo y contragolpe conducido obviamente por Neymar y definido de maravilla por Rakitic. A partir de aquí, la necesidad del BATE facilitó el encuentro a los catalanes, que hallaron metros para correr con mayor frecuencia. Así llegó el segundo tanto de Rakitic, calcado en esencia al primero. Las escasas salidas del BATE fueron bien resueltas por un Bartra que adora este tipo de partidos simples en los que solo tiene que medirse con un punta aislado y poco virtuoso. En realidad, todo estaba finiquitado y solo quedaba disfrutar de un Neymar suelto, libre, sintiéndose estrella en una noche de Champions.
@davidwences 21 octubre, 2015
Será posible preservar algo de este Neymar desatado cuando vuelva Messi? Probablemente el equilibrio ahí puede ser imparable.
Recordé esa aventura original con el "Busquets como único testigo". Ayer se pegó a Ney para ser continuador de sus jugadas. Su labor de interior, casi siempre discreta, estuvo amortizada por ahí