Entre todas las grandes no hay ninguna cuyo ataque posicional sea una fluida fuente de ocasiones, pero nadie ha evidenciado más problemas en estático que la Portugal de Paulo Bento en los últimos años. Si bien su rendimiento en días TOP suele convencer, ante rivales menores se muestra incapaz prácticamente siempre. Quedó en la memoria la exhibición de Cristiano Ronaldo en el play off contra Suecia, pero lo que no se recuerda es que los lusos exigieron proezas similares a su líder incluso para colarse en la propia repesca; es decir, para quedar segunda en el grupo de Rusia, Israel, Irlanda del Norte, Luxemburgo y Azerbaiyán. Ese es el nivel objetivo de Portugal.
J. Löw probará algo nuevoDicho esto, si se imponen las previsiones, Portugal desempeñará hoy el rol que más le gusta. Como adelantó Guillermo Valverde en #minutomundial, se espera una versión guardiolizada de Alemania para esta noche, con Lahm de mediocentro y Toni Kroos de interior en un 4-3-3 que tendría a Khedira como tercera pata del centro del campo. Dicha disposición implicaría posesión y ataque estático por sistema, motivo por el cual podría perder su titularidad Mesut Özil, el germano más representativo de la Alemania de transiciones de los últimos cuatro años. Como prueba hay que reconocer que es estimulante. Löw no fue capaz de darle el equipo a Özil y otorgarle solidez al esquema al mismo tiempo, no supo encontrar espacios para su crack sin partirse por la mitad él mismo, y algo había que intentar porque aquéllo empezaba a no ser ni competitivo. ¿Que el Bayern perdió 5-0 contra el Real? Sí, pero si jugase el Mundial, solo Brasil podría quitárselo. El fútbol de selecciones tiene menos nivel. El bajo ritmo de Kroos como metrónomo no debería ser una traba insalvable. Potencialmente, arregla más de lo que avería.
Paulo Bento ha preparado un 4-2-4 como plan B y le funciona.
En el caso de que Alemania se adelantase y decidiese replegar y salir a la contra, Portugal tendría que proponer y encontraría los problemas de siempre. ¿O no? La duda reside en que en los últimos amistosos Paulo Bento ha intentado desarrollar un (simple) plan B que podría dar frutos. El gran don de su plantilla en ataque posicional es, sin duda, la capacidad rematadora de Cristiano Ronaldo, y para potenciarla ha intentado mejorar el 4-2-4 -donde él no es extremo sino segunda punta- de cara al Mundial. En dicha formación sí tendría plaza fija Nani, el sempiterno número dos del «7» en la selección, a quien en el último envite se le vio algo más que en forma pero que no tiene garantizada su plaza en el once. Lleva dos años demasiado malos como para ello.
A propósito, pocos adversarios más apropiados que Alemania para empezar a medir de qué pasta está hecho William Carvalho. Si juega.
pouco_barulho 16 junio, 2014
El problema es que parece que no va a jugar