Oyendo a Michel hace pocos días en una entrevista que le hizo Áxel Torres en Marcador Internacional, me gustó como el entrenador madrileño explicaba el gran valor del primer tramo de campeonato del conjunto griego: haber conseguido que sus chicos compitieran bajo cualquier circunstancia. Enlazando con ello, la diferencia entre Olympiakos y PSG es que uno es gigante de su liga y uno de los gigantes de Europa y el equipo griego ha de ejercer de capitán general los domingos pero cambiar el chip y ser poco más que soldado raso cuando juega entre semana. Eso, futbolísticamente, produce un cambio de registro muy importante.
La primera media hora local fue de Marco Verratti… e Ibra
Por ejemplo, Michel puso a Holebas de volante zurdo, por delante del lateral, posición de la que suele partir el greco-alemán. Olympiakos sabe que no está en su mano dibujar el contexto táctico del encuentro y que no puede ejercer una posición dominante si sufre algún revés durante el partido. Si nos fijamos en la primera media hora, la superioridad era tan evidente, que los del Pireo no podían ser dueños de sus movimientos, pero en un gran partido de su trío defensivo, Salino, Siovas y Manolas, y una posterior relajación local, le permitió creer en sus posibilidades y competir en el Parque parisino. No podía dominar, no era dueño de los ritmos, no era el grande sobre el campo… pero no se fue del partido.
Nos detenemos un poco en la primera media hora gala, que no fue tan fructífera como la que desarrolló ante Benfica pero fue primorosa. Laurent BlancZlatan jugó a otro deporte ha apostado todas sus energías en hacer un equipo profundamente relacionado con crear en campo rival y defender de manera consecuente: desarmar al oponente y recuperar fácil por mejor posicionamiento. Es una posesión integral, desde centrales, y con movimientos de manual en lo que se refiere a arrastrar y ocupar zonas que compañeros vacían para venir hacia el balón: juntan, se ordenan, liberan a banda. Es una orquesta que no tiró demasiado a puerta porque la línea defensiva rival lo impidió y porque la altura del choque no era excesiva, pero fue un control absoluto del juego. Fueron 30 minutos de gran nivel colectivo, pero aunque esté feo señalar, no terminan de abarcar los elogios sobre Zlatan Ibrahimovic y Marco Verratti: sólo los fenómenos dominan los partidos, literalmente, andando.
Olympiakos depende de sí mismo para clasificar a octavos de final
La escasa tensión del encuentro dejó algo partido al PSG cuando sufría alguna pérdida a partir del minuto 20-25, y los griegos empezaron a gotear córners y un par de remates que intranquilizaron a la grada. Para mayor alegría de los helenos, Verratti fue expulsado por doble amarilla y sin someter demasiado a la defensa de Blanc, lograron empatar a la salida de un córner. Defendido en zona, Manolas aprovechó una de las circunstancias, y no es secundaria, donde Alex, no sólo es superior a Marquinhos, sino a la gran mayoría de homólogos europeos: el balón aéreo, sobre todo defensivo, donde el ex-Chelsea sigue siendo de lo mejor del mundo.
Con 1-1, el PSG clasificado como primero y el Olympiakos en una situación muy favorable para su clasificación, se durmió el partido hasta que al borde del final, Marquinhos, en posición de segundo punta, habilitó con un gran pase para que Cavani anotase su 12º gol de la temporada. En inferioridad, los de Blanc celebraron la victoria con la energía de un equipo imponente, sabedor de su gran momento de forma y de tener una plantilla para cualquier cosa.
Abel Rojas 28 noviembre, 2013
Vamos a ver, voy por el minuto 30 y no me contengo más:
¿Qué barbaridad es ésta?
Por favor, qué equipo más divertidísimo y qué claridad y qué confianza con el balón. Es impresionante. Y lo de Verratti… je. Si este hombre no es titular en el Mundial de Brasil me voy a enfadar.