Hay equipos a los que Sudamérica les reserva un lugar en la memoria colectiva, por encima de los títulos que pudieran haber logrado. Si encima levantaron trofeos, miel sobre hojuelas. Pocas figuras generan tanta pasión y reconocimiento como Arthur Antunes Coimbra, más conocido como Zico. Con su Flamengo, el genio brasileño lo ganó todo. Campeón de América en 1981, Japón presenciaría la consagración mundial del Pelé blanco. El conjunto brasileño pasó por encima del Liverpool de Bob Paisley y Kenny Daglish, derrotándolo por un inapelable 3-0. Los goles de Nunes, por partida doble y Adilio sellaron la diferencia, y terminaban de hacer del gran Zico un absoluto mito del Fla.
Aunque la mayor fama de sus siete Copas de Europa se la llevan el glorioso ciclo de Arrigo Sacchi y los éxitos modernos de los Seedorf, Nesta, Gattuso o Pirlo, la década de los 60 ya fue muy productiva para el AC Milan. Vencedor en el 63, iba a repetir conquista en la final de 1969, disputada en el Santiago Bernabéu. Tras eliminar en semifinales al vigente campeón, el United de Charlton y Best, en la final esperaba un incipiente Ajax, liderado por un joven Johan Cruyff, todavía pelín lejos de los Balones de Oro y el reconocimiento unánime. El héroe de la final fue Pierino Prati, autor de un hat-trick que daba la segunda Copa de Campeones a la mítica sociedad italiana.
letissier 19 noviembre, 2012
Cuánto daño le hizo eso del "Pele blanco" a Zico…