El Atlético de Madrid levantó un nuevo título europeo y volvió a demostrar que su techo objetivo está al alcance de muy pocos equipos hoy por hoy. Los de Simeone conforman un conjunto sincero, meticuloso, trabajado y competitivo; áspero, desagradable, firme y cruel. Una obra que viene del pasado, del poderoso Calcio de los 90, para demostrar que en el 2012 se puede ganar sin presionar a toda cancha, sin achicar hasta el centro del campo, sin correr como el viento y sin que, mientras tanto, alguien pueda dudar de que juega muy bien. El deporte es de los protagonistas. Así fue y así será. En estos momentos, el Atlético cuenta con Courtois, Godín, Turan y Adrián, por ejemplo. Además, empieza sus Finales ganando 2-0, gracias al «9» inmejorable. Si cambiase a Radamel Falcao por cualquier otro, sus resultados menguarían. Su confirmada continuidad, el verdadero título.
Hay encuentros en los que un solo futbolista tiene más valor que todo lo demás. Que los sistemas, que los ajustes, que la fortuna… queLo de «El Tigre» Falcao pasó a la historia cualquier cosa. Este partido estaba llamado a ser cerrado. La pelota iba a cambiar de dueño a menudo, pero siempre enfrentaría un sistema defensivo más o menos bien armado, en ventaja estratégica por el hecho de que sin la velocidad punta que ya pillarán es más fácil proteger que desbordar. Falcao no transforma en gol un gran caudal ofensivo; se inventa 5 ocasiones en 50 minutos y desquicia al Chelsea FC, que no entendía el porqué de tanta hambre. Realmente, fue como soltar un tigre en una salita. El delantero no solo goleó. Él no defiende, pero siempre está en el lado ofendido, para recibir presto el pase frontal que nadie le quita nunca. Sacó así al Atlético del área tras cada robo, orientando la transición hacia el lado débil y siempre en el momento justo. Es increíble. Es buenísimo.
Adrián se ligó al movimiento defensivo para formar un 4-1-4-1.
Expuesto lo diferente, vamos a lo lógico, que fue perfecto. El Atlético mantiene su esencia: es un equipo que espera el error ajeno. No comparte la hoy típica limitación -quizá defecto- de necesitar robar la pelota muy rápidamente, trabaja la ocupación del espacio para que batir sus líneas sea muy duro y espera el fallo. Normalmente esto lo hacía en un 4-4-2 en línea, abriendo a Turan y Diego sobre las bandas. Ayer, Adrián fue involucrado en la defensa, Mario Suárez (brutal) bajó un escalón y se protegió desde un 4-1-4-1 que permitió a Mario ajustar sobre los movimientos de Hazard, que solía recibir en desventaja y, sin excepción, en situaciones paradas. Y es que ahí estuvo el otro trazo maestro de «El Cholo»: el Atleti apenas convirtió en contragolpes tres o cuatro transiciones defensa-ataque en todo el choque; precisamente para evitar un discurso de ida a vuelta que no le favorecía. Una vez alcanzaba zona ofensiva el equipo formaba triángulos asociativos en las bandas -grandes Turan y Adrián– y bajaba el ritmo al mínimo, exigiendo una basculación total del Chelsea que alejaba y separaba a Hazard de sus aliados. La verdad, fue un partido muy decantado, casi que careció de competitividad, pero el Atlético de Madrid ofrece tanto en sus mejores noches que la cinta es para verla repetida y disfrutar, al menos, una vez más.
Siguen Simeone y Falcao.
Continuará.
iniestinho 1 septiembre, 2012
Yo todavia estoy impactado por lo que he visto, ha sdo tremendo ver un catenaccio que llegaban arriba al paso con 4-5 hombres, como maduraban la jugada, alucinante el contraataque ¡al trote! de la primera parte que no ha acabado en gol de milagro. El Atletico destilaba suficiencia en cada jugada. Objetivamente solo se me ocurren 4-5 equipos mejores que este Atletico y es una pena que no esten en Champions para certificarlo, porque ademas no veo a Tito, Mancini o Heynckes superando al Cholo. Desconozco la profundidad de plantilla colchonera y reconozco que el año pasado solo vi un partido del Atletico, asi que igual l a piscina esta vacia pero ¿liga de dos? a ver si va a ser liga de tres o de 1+2?