La titularidad de Cesc Fábregas en detrimento de un ariete más concreto fue la noticia de la sobremesa. Italia iba a cerrar con zaga de 5 y Del Bosque intuyó un repliegue total, ante lo que el centrocampista tenía mucho sentido. Ningún delantero patrio ofrece más garantía de gol y su ruptura en distancias cortas es un activo determinante. Nunca sabremos qué dijo Prandelli a su equipo tras conocer la bomba, si cambió todo en respuesta o si reafirmó optimista una idea ya pactada; pero la penúltima campeona del mundo defendió en campo contrario y dominó durante 45 minutos.
El axioma italiano era claro: «Apretar como si no hubiese un mañana que si la filtran no pasa nada»Xavi requiere la perfección para no pesar, y así era. No es que Maggio y Giaccherini persiguieran cada apoyo de Iniesta y Silva, es que Motta y Marchisio llegaban hasta Xavi, Xabi Alonso y Busquets en el acoso, lo que incidió bastante en el reparto de posesión. España no podía ni quedarse con la pelota. O sea, algo muy parecido a lo que le pasó al FC Barcelona en varios momentos del año. Motivos idénticos.
El dueño del destino en esta franja del choque fue De Rossi, un centralDe Rossi fue el jefazo ante la España sin «9» muy contextual. Hasta el punto de que quedó la sensación de que se salió hasta la entrada de Torres e hizo el ridículo cuando le tocó enfrentarlo. En principio, su talento defensivo le permitió manejar los hilos del achique con maestría, posicionando a Chiellini y Bonucci a su voluntad y lanzando a los carrileros hacia arriba. Gran movimiento de Prandelli y genial interpretación de Danielle, pero que no insistan, que hasta Kevin Doyle puede sacar cosas de ahí.
El fútbol de Cassano y los milagros de Iniesta capitanearon los ataques en el primer tiempo
Que la pérdida española fuese forzada y no producto de un riesgo asumido favoreció a Pirlo, que encontró a Cassano revoloteando por los tres carriles. Antonio es genial, lo entiende todo y ve más. Eliminó la lateralidad de nuestro mediocampo y dejó en igualdad numérica los duelos externos. Mientras, la respuesta hispana era el milagro. Creó su puñadito de ocasiones, pero optando -o siendo obligado a optar- por un camino por el que es imposible andar de seguido. Cada jugada peligrosa requería 4 pases medidos al milímetro y 3 desmarques temporizados a la décima de segundo. Lo brutal es que el virtuosismo de Iniesta y su alrededor pueda con eso.
El fútbol de Iniesta y el pésimo balance defensivo español capitanearon los ataques en el segundo tiempo
En la segunda parte, España cambió de sistema.Con Xavi de «10» se ganó ritmo Alonso y Busquets se dividieron la pista en izquierda y derecha, de manera radical, y a Xavi se le expulsó de la base, más radicalmente aun. O sea, se pasó a jugar con un 4-2-3-1 en toda regla, de verdad verdadera. Y el equipo mejoró. Alonso, iniciando, podía filtrar de manera vertical; e Iniesta, recibiendo, tenía pases horizontales en tres cuartos. Además, Xavi se hizo temer. Lo que en la base es una lentitud que satura, en mediapunta es una amenaza de pase que condiciona. Al menos a nosotros, que cuando lo vemos con opción de meter la asistencia nos ponemos contentos.
No fue gratis el ajuste comentado, al que se le unió una posición fijada arribaXabi y Busquets sufrieron en la tran. defensiva de los laterales para reforzar el mensaje. Cada robo italiano era un calvario para el, entonces sí, doble pivote nacional. Les llegaban de cara, en vuelo y tras un trabajo nulo de Iniesta-Xavi-Silva, con los laterales superados y los centrales atados por una doble punta que se cerraba a posta. El gol de Di Natale no fue fallo de Busquets, sino defecto del sistema. Aunque hay que decir que por cada acercamiento italiano había tres españoles.
Navas y Torres nos dieron la ventaja.
Jesús Navas logró paliar en cierta medida el problema en transición defensiva, pues su salida repercutió para bien en la posición de Arbeloa. Álvaro dejó de vivir en zona de extremo y ayudó a Busquets a cerrar la puerta en su banda, ganando así España en empaque. Y Torres, directamente, destrozó a Italia. Para tener opciones ofensivas contra España es casi obligatorio defenderle arriba, porque si no mete a 7 jugadores en campo contrario y domina la segunda jugada. Con Fernando, el invento se cae. A De Rossi lo mató. Es una pena que, por «h» o por «b», su juego no se refleje en el marcador. Y a ver, la circunstancia está ahí, y de trivial no tiene nada. Se entienden todas las posturas posibles al respecto.
@ecosdelbalon 11 junio, 2012
@ AntonioSH
Creo que el impacto de Navas fue bueno para España. Es que es muy bueno, es difícil que un tipo así reste. Distinto es que pienses que Silva rente aún más, que por supuesto.
El tema es que fijar un costado ha permitido a Xavi e Iniesta tener un poco más de ancho y ha cerrado bastante mejor la transición defensiva, al ganar a Arbeloa, que fijado como extremo era sobrepasado siempre. Para mí fue un cambio acertado!!
@ Cerdido
Cuando a ti te dicen y compruebas que Italia va a jugar con 5 defensas y un triángulo en mediocampo… tú piensas que van a defender en campo contrario??
@ Derkin
La que Buffon le saca a Torres es la irrefutable prueba de que Gianluca es un genio. Es una bestialidad cómo se anticipa a la acción del delantero y se la saca como si fuese un central. En serio, bestial total. Para mí, lo tengo claro, el mejor portero que he visto nunca.
En su apogeo, por supuesto. Ahora no tanto.
@ Gila
Es que hay que reconocer que Maggio se comió a Alba en el primer tiempo, y no fue superado precisamente en el segundo. Mucho tiene que ver con el tema Cassano, que encerró a los centrocampistas españoles en el medio y no les dejó casi nunca lanzar ayudas laterales. Cuántos veces en el primer tiempo vemos ayudas de Busquets o Alonso a Alba o Arbeloa? Muy, muy poquitas. Cassano estuvo genial.